"Se pudo haber hecho algo más": familia de joven desaparecido en San Fabián investigará negligencia en búsqueda

¿Qué pasó?

El hermano de Leonardo Molina, joven desaparecido el 30 de junio tras subir el cerro Malalcura, en la Región de Ñuble, lamentó la suspensión de la búsqueda por malas condiciones climáticas, pero además, anunció que indagarán si hubo negligencia por parte de Carabineros en el momento de activar el rastreo.

¿Qué dijo?

Luis Molina, señaló que "el viernes pasado nos comunicamos con la fiscal Tamara Cuello, la persona que lleva a cargo la investigación de la desaparición de mi hermano Leonardo, ella nos señaló que esta primera búsqueda masiva llegaba a su fin y durante esta semana deberíamos tener otra reunión con ella para ver qué pasos a seguir a partir de ahora". 

"Por las condiciones climáticas, actualmente no hay ningún equipo trabajando en la zona. Como familia estamos muy apenados por esta decisión", indicó.

Además, manifestó que "las primeras horas de la desaparición de mi hermano, los primeros minutos y (por los) audios que él envió, creemos firmemente que se pudo haber hecho algo más"

"Es por eso que en paralelo, mientras se trabaja en la búsqueda de mi hermano, porque vamos a recuperar a Leonardo, estamos trabajando en esclarecer cuáles fueron los hechos, los protocolos que siguió Carabineros y si estos se ajustaron a lo que efectivamente deberían haber hecho, ya que mi hermano dio aviso cerca de las 2 de la tarde que se encontraba en peligro y que no podía descender del cerro y Carabineros actuó recién a las 4 de la tarde y conformó la mesa de emergencia a eso de las 8 de la noche", detalló.

Asimismo, sostuvo que "creemos que se perdieron horas cruciales y queremos agotar todas las instancias y esclarecer si hubo negligencia de parte de la institución o de parte del Estado.

La desaparición del joven estudiante

Leonardo Molina llamó desde su celular a Carabineros a las 14:00 horas del jueves 30 de junio, señalando que había subido solo al cerro Malalcura y que se encontraba desorientado, por lo que no podía descender. De inmediato, el personal policial inició la búsqueda, y en los días posteriores se fueron sumando rescatistas especializados del Ejército, Bomberos y sociedad civil, como Socorro Andino y Asociación SAR Ñuble, además de lugareños que conocen la zona.

Las labores de rastreo han implicado el despliegue de 292 rescatistas por tierra y aire, con helicópteros, drones, vehículos 4x4, cuatrimotos, detectores de metales, y además se han realizado trabajos de sondaje con varillas que se introdujeron en una capa de nieve de hasta 3 metros de profundidad.

En las últimas jornadas, parte de los rescatistas fueron trasladados en helicóptero a la zona de alta montaña, completando 12 vuelos para movilizar a casi 60 efectivos que efectuaron labores de descenso en rapel desde las laderas del cerro.

Todo lo anterior, se llevó a cabo bajo difíciles condiciones meteorológicas, ya que los últimos días ha caído mucha nieve y lluvia, lo que ha complicado el trabajo en esa zona cordillerana, que ya es de difícil acceso, y por lo cual tuvieron que suspenderse las labores de búsqueda.