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"Dios escuchó nuestras plegarias": La historia de la madre chilota que viajó a Coquimbo para salvar a su bebé

"Ese día fue horrible. Mi guata estaba llena de nervio". Estas fueron las palabras de Rafaella Mansilla, madre de un bebé de dos meses que llevaba un par de días intubado por problemas respiratorios en el Hospital de Castro, en la Isla de Chiloé.

El deterioro en la salud del lactante generó incertidumbre y preocupación tanto en la mujer como en el cuerpo médico que lo estaba atendiendo. Sin embargo, todo cambió cuando dieron aviso de una cama disponible en otra ciudad del país.

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La cama del pequeño, llamado Joseph, eso sí, estaba disponible en el Hospital de Coquimbo, por lo que la joven madre de 26 años tendría que viajar miles de kilómetros para poder llegar hasta allá con su hijo.

No obstante, esto no fue un impedimento. Más bien, pese a la lejanía, esta noticia significó una luz de esperanza para que su hijo pudiera sobrevivir a los problemas de salud que estaba presentando.

El largo trayecto y la llegada a Coquimbo

La madre de Joseph señaló que rara vez había salido de la Isla de Chiloé y que como mucho había viajado a Valdivia, así que tampoco sabía dónde quedaba Coquimbo.

Al enterarse de lo lejos de su ubicación, Rafaella indicó: "Ya, pero no importa. Lo que importa es que Dios escuchó nuestras plegarias".

En este contexto, una ambulancia trasladó al pequeño y su madre al aeródromo de Mocopulli y de allí ambos emprendieron rumbo en un avión ambulancia hasta el aeropuerto de La Serena.

"Ese día fue horrible. Mi guata estaba llena de nervio. Quise dormir en el viaje y no pude", remarcó la joven, quien jamás había viajado en avión.

Una vez habiendo llegado al aeropuerto de La Serena, ella y su guagua fueron derivados en otra ambulancia al Hospital de Coquimbo.

 

Hospital de Coquimbo / Aton
Hospital de Coquimbo / Aton

 

Los problemas de salud del pequeño

Cuando llegaron al centro médico, Joseph tuvo un paro cardiorrespiratorio, pero personal médico logró estabilizarlo.

"Estaba sola, y que te digan que tu hijo casi murió, que con adrenalina su corazón volvió a funcionar, para mí fue lo peor. Me senté en una esquina del hospital. Lo único que quería era que todo pasara", sostuvo Rafaella a LUN.

La joven comentó que todo había comenzado con varias visitas al consultorio de Chonchi, que se encuentra en la Isla de Chiloé. En ese lugar, los doctores le dijeron que su hijo tenía un resfrío común y le recetaron paracetamol, para luego enviarlo a su casa.

Al no mejorar, una doctora le recomendó salbutamol y prednisona por siete días, pero nada de esto funcionó: "Lo sentí como que le costaba respirar... Llevaba dos días sin tomar leche".

"Él ya se escuchaba mal. Le vino el hundimiento en las costillas y me decían que era poco todavía, algo normal. Fue tanto que mi hijo respiraba con todo su cuerpo", reveló la joven.

La mejoría de Joseph y la vuelta a Chiloé

Finalmente, ya en Coquimbo y después de sobrevivir al paro cardiorrespiratorio, Joseph mejoró de forma rápida, y con los días los doctores le fueron bajando la dosis de anestesia.

Rafaella y su bebé se mantuvieron en la ciudad nortina durante una semana, hasta que un avión, el martes de esta semana, los llevó de vuelta a Chiloé.

Al día de hoy, Joseph se encuentra internado en el Hospital de Castro para así finalizar su rehabilitación: "Me vine con la calma de que mi hijo venía bien", agregó su madre.

"El paciente estuvo acompañado por su madre"

Alejandra Cortés, médico pediatra y jefa de la Unidad de Pacientes Críticos Pediátricos del Hospital de Coquimbo, explicó la atención que recibió el lactante en el recinto médico y afirmó que "acá en la unidad estamos hace varios meses con la Ley Mila, de acompañamiento 24 horas, y esta no fue la excepción".

"El paciente estuvo acompañado por su madre durante toda la hospitalización acá en nuestra unidad", agregó la doctora.

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