"He llorado mucho": El emotivo adiós del dueño de zapatería que cerrará en La Serena tras 65 años de historia

Además de un golpe a la economía de la región de Coquimbo, el cierre de la zapatería Estrella Alpina es un nocaut para la historia de La Serena. Después de 65 años atendiendo al público, el emblemático recinto está liquidando todos sus productos antes de bajar sus cortinas definitivamente.

Se pondrá punto final a una empresa que nació del ingenio de un emprendedor italiano y cuya gerencia heredó el más joven de sus cuatro hijos, Renato Dalbosco, quien aprendió el oficio en sus años de adolescencia.

Con él en la administración se implementaron mejoras que eran novedad en la década de los 80. Más las importaciones por mayor al extranjero, Estrella Alpina alcanzó un éxito que se tradujo en quince sucursales repartidas entre Coquimbo y Santiago.

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De hecho, la compañía se jacta de ser la primera tienda en abrir en el Mallplaza La Serena. Según acusa, allí los grandes del retail estudiaron su exitoso negocio y habilitaron mayores espacios para el calzado, quitándole clientela. Por estas y otras razones, abandonaron el mall después de doce años.

La crisis que vino después del éxito

No había tiempo para lamentarse, porque la familia estaba centrada en otro proyecto. Mientras la zapatería seguía con fuerza, Renato y sus hermanos Giorgio, Roberto y Franco fundaron la Viña Dalbosco en 2008, en el Valle del Limarí, también en la región de Coquimbo.

La curva del éxito continuó en alza durante la década siguiente, pero dos capítulos de la historia reciente de Chile lo cambiarían todo. "Cuando estábamos funcionando, justo viene el estallido y ahí empiezan los problemas", contó el gerente general a Mi Radio.

A contar de octubre de 2019, la mayoría de las tiendas cerraba más temprano que lo habitual por los desórdenes que marcaron la crisis. Estrella Alpina no fue la excepción: "A la gente le costaba llegar a los locales del centro. Compraba donde estaba más cerca y eso abrió una puerta a la venta por Internet. Ahí nos empezamos a remecer", señaló Renato.

El nocaut que terminó por liquidar a la zapatería

Consciente del nuevo comportamiento de los consumidores, la zapatería buscó la implementación de un sistema online para vender, pero apenas lo estaba diseñando cuando se desató la pandemia del coronavirus, la que concentró los recursos destinados para otras áreas.

"(El covid) nos llegó muy rápido y no se pudo hacer el cambio. Económicamente, fue imposible, no teníamos cómo (...) Tratamos de armarlo, pero ya estábamos muy lejos", contó Dalbosco en la entrevista.

Ese atraso en comparación con la competencia dio paso a otro fenómeno: "La gente ocupó la zapatería para irse a probar los zapatos y después comprarlos por Internet con un 20% de descuento. Los márgenes no nos daban", agregó.

Así se tomó la dolorosa decisión de cerrar Estrella Alpina

El cierre comenzó a verse como opción tras un diálogo entre el empresario y sus hermanos con dos de sus hijas, un año y medio atrás: "Nos muestran los datos en una pantalla y no la queríamos creer, súper crudo que nos digan 'están perdiendo montones de millones todos los meses'".

La posibilidad se transformó en certeza hace dos meses: "Cada vez nos comíamos más capital. Cuando definimos el cierre, no teníamos plata para despedir a los trabajadores". Para juntar recursos, los Dalbosco se vieron obligados a deshacerse de parte de sus activos.

"He llorado mucho, porque nunca pensé que (el cierre) iba a ocurrir (...) Fue muy entretenido, aprendí mucho de la vida, mucho que agradecer. La gente, se lo debo todos a ustedes", concluyó Renato con su voz entrecortada, emocionado por el término de una historia que congregó a serenenses por 65 años. 

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