Decretan prisión preventiva para los cinco imputados por el asesinato de ingeniero en Curacaví

¿Qué pasó? 

Este miércoles el Juzgado de Garantía de Curacaví decretó prisión preventiva para los cinco imputados por el crimen de Michael Peñaloza, ingeniero de 44 años que murió atropellado con su propio vehículo tras ser robado por delincuentes desde su parcela en la comuna antes mencionada, la madrugada del 19 de agosto.

A solicitud del Ministerio Público, el tribunal ordenó la máxima cautelar por un periodo de 120 días para los imputados Esabú Muñoz Escobar, José Contreras Escobar, Vicente Higuera Muñoz, Matías Tapia Adasme y Kevin Aguilar. 

"Existen roles determinados por cada uno de ellos"

Al término de la audiencia, el fiscal Jefe de Focos Occidente, Leonardo Tapia, señaló que a los acusados se les formalizó por los delitos de robo con homicidio, robo en lugar habitado y también por el delito de incendio. 

Ir a la siguiente nota

"Existen roles determinados por cada uno de ellos. Hay uno que se dedica al transporte del grupo hasta el lugar en donde ocurren estos hechos, precisamente al domicilio de la víctima, ejerciendo algún rol de vigilancia", indicó el persecutor. 

Una vez en la parcela de Peñaloza, los otros integrantes de la banda procedieron a "forzar los cercos perimetrales, ingresar a la vivienda y sustraer la especie". 

"Existe una premeditación" 

"Recordemos que este hecho nace alrededor de las 02:00 de la madrugada del 19 de agosto, en donde en una primera oportunidad ingresa este grupo de sujetos con el propósito de sustraer un vehículo, no lográndolo en ese momento", relató el fiscal. 

La autoridad agregó que, luego, esa misma banda regresó al terreno con "elementos apropiados", tales como herramientas, para cometer el delito y así "romper el portón de acceso y así facilitar la huida, siendo en ese momento cuando la víctima advierte este hecho".

Los imputados cortaron la luz de la parcela, pero eso no fue impedimento para que el propietario intentara frustrar la sustracción del vehículo. "Uno de los sujetos que conduce este vehículo, sin importar que se encontraba la víctima, pasa sobre ella, la atropella, causándole la muerte", indicó Tapia. 

"Nosotros postulamos que aquí existe una premeditación y un acuerdo previo para la concreción de este delito. No tan solo en el momento mismo de la ocurrencia de los hechos, sino que anterior a este", afirmó el fiscal.

Según explicó, los integrantes de la agrupación "se ponen de acuerdo de la forma en que van a concurrir al lugar, tienen los medios para hacerlo, en este caso con un vehículo que proporciona uno de ellos, para posteriormente ubicar herramientas o elementos necesarios para la concreción". 

"No es un accidente"

En la instancia, la autoridad fue consultada sobre la declaración del imputado que conducía el vehículo, quien aseguró que el atropello se produjo luego que la víctima se cruzara justo cuando aceleró el automóvil. 

Al respecto, el fiscal mencionó que "los antecedentes que tenemos no es que la víctima se haya cruzado, sino que la víctima intentó repeler la sustracción del vehículo. No es un cruce, no es un accidente, no es un cuasi delito de homicidio. Es una intención positiva de causarle la muerte".