La pista clave que permitió detener al acusado de asesinar a carabinero en Concepción

¿Qué pasó?

El martes se realizó la audiencia de formalización en contra de Jhoyner Enrique Bonilla Brito, acusado y único imputado por el asesinato de Álex Salazar, el carabinero que fue atropellado en medio de una fiscalización. En la instancia judicial, la declaración de una colega de la víctima permitió dilucidar la clave para dar con el paradero de Bonilla. 

El hecho 

Si bien el deceso de Salazar ocurrió durante el mismo martes, lo cierto es que el hecho delictivo se remonta al domingo. Ese fue el día que el imputado decidió atacarlo con el auto. No solo a él, sino que también a otros dos carabineros, como se estipuló en la formalización. 

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Ese domingo, el imputado se encontraba afuera de un local nocturno, al mismo que llegaron efectivos de Carabineros para realizar el control.

Cuando los policías se prestaban a detener a un sujeto, los carabineros pidieron refuerzos. El individuo puso resistencia y los uniformados empezaron a recibir botellas mientras realizaban la detención. 

Es precisamente en ese momento, cuando el acusado sube a un auto y arremete con el vehículo en contra de la víctima y otros dos de sus compañeros, para posteriormente darse a la fuga.

El grito

La carabinera Cecilia González fue quien logró la detención y fue uno de los testimonios presentes en la audiencia. González indicó que a eso de las 05:45 recibieron la instrucción de que todas las patrullas del perímetro debían trasladarse a las intersecciones de Arturo Prat con Freire. 

"Nos trasladamos de forma inmediata a dicho lugar. En eso nuevamente escuchamos vía radial que un funcionario de dotación de la Primera Comisaría de Carabineros de Concepción había sido atropellado por un vehículo de color blanco y que era conducido por un sujeto que vestía con vestimentas oscuras y jockey de color blanco y que se había dado a la fuga del lugar", dijo González, según cuenta Radio Bío Bío.

Pero debieron desviarse, pues un nuevo aviso les advirtió que el uniformado que hacía guardia en una comisaría vio pasar un vehículo con las mismas características del auto responsable del ataque. 

Les avisaron, cuenta González, "que el vehículo iba a gran velocidad por calle Serrano en dirección al sureste, en dirección al Parque Ecuador, dejando el vehículo abandonado en la intersección de avenida Chacabuco con calle Serrano y el sujeto se da a la fuga de infantería". 

Luego de esa alerta, decidieron empezaron con patrullajes en vehículos policiales para hallar a la persona en cuestión. Es en ese momento que la uniformada indica que "escucho que una persona de sexo masculino grita a viva voz: 'Vi la persona con vestimenta de color negro corriendo en dirección a calle Angol, entre calle Víctor Lamas y avenida Chacabuco, y ocultarse bajo un vehículo'. Por tal motivo, nos trasladamos a calle Angol comenzando una revisión de los vehículos que se encontraban estacionados en dicho lugar".

La detención

Gracias a esa pista pudieron encontrar a Bonilla Brito: "Llegando por calle Angol, frente al número 31, logré ver un sujeto de sexo masculino oculto abajo de un vehículo marca Suzuki, modelo Celerio, color gris".

Las características físicas de la persona coincidían con las del sospechoso y con las vestimentas del mismo, por lo que procedieron a la detención.

Finalmente, el Ministerio Público imputó a Bonilla Brito por dos delitos de maltrato a carabinero, homicidio simple a carabinero en función y conducción en estado de ebriedad. Esto último, considerando que el sujeto arrojó 1,79 gramos de alcohol por litro de sangre tras realizarle el alcotest.