Dictan 17 años de cárcel para dueño de restaurante por femicidio: Mató a su pareja en estacionamiento del local

A 17 años de presidio fue condenado Joaquín Enrique Abarca Zúñiga, quien enfrentaba a la justicia por haber cometido el delito de femicidio consumado. En octubre de 2019, en el estacionamiento de restaurante "El Mesón de Kike", el hombre asesinó a tiros a su conviviente, con la que mantenía una relación.

En un principio, el Ministerio Público exigía una pena de 20 años de cárcel, pero el cuarto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago rebajó tres años la condena al considerar atenuantes a favor del empresario. Sin embargo, los jueces manifestaron que "actuó con premeditación conocida y alevosía".

Durante el juicio declararon en calidad de testigos algunos amigos de la mujer y garzones del establecimiento comercial, los que entregaron detalles de cómo era la relación que mantenía el asesino y la víctima. 

El asesinato en el estacionamiento del restaurante

Los hechos se remontan a la tarde del 29 de octubre de 2019, en el estacionamiento del restaurante, donde ambos desempeñaban funciones. Ahí, con pistola en mano, Abarca Zúñiga "se aproximó a su conviviente y, sin mediar palabra ni provocación por parte de esta última, efectuó dos disparos en su contra", los que causaron su muerte inmediata, según lo expuesto en el juicio de primera instancia.

La fiscal Patricia Varas manifestó que "el femicidio es la expresión de más violencia contra la mujer (...) la víctima perdió la vida a manos de su conviviente, quien ya tenía una decisión tomada de darle muerte. Ella no pudo preverla, ya que no pudo siquiera defenderse, pues el acusado sabía que ella salía a esa hora de su lugar de trabajo".

"Acabo de quitarle la vida a mi pareja"

El dueño de "El Mesón de Kike" declaró los minutos posteriores al asesinato cometido contra su pareja. Junto con contextualizar los años de relación, señaló que "el 29 de octubre yo estaba en la caja, donde permanecía el arma, porque sufrí cinco asaltos, incluso me habían pegado. No sé en qué momento tomé la pistola, me voy al estacionamiento y disparo".

"Quisiera pedirles perdón a los padres de ella. El arma estaba siempre en el local, yo tenía dos armas, siempre en el domicilio donde estaban inscritas. No pasan más de diez minutos entre que disparo y me voy a la comisaría. Un carabinero me saluda y le cuento 'acabo de quitarle la vida a mi pareja recién en el negocio'", relató.

Celos y maltratos

Uno de los garzones del recinto le señaló a un funcionario de Carabineros que, supuestamente, Abarca Zúñiga antes había llevado el celular de la víctima a un negocio para desbloquearlo, pues tenía las sospechas de que estaba siendo engañado. Otro testigo declaró que el condenado le dijo que habría visto a su mujer con "el huevón de los pescados", según consigna el fallo.

Por su parte, una amiga de la mujer aseguró que el asesino se caracterizaba por ser celópata, maltratador, que no le hablaba ni dejaba ir al baño con su celular. Además, presuntamente, dos semanas antes del asesinato, la propia afectada le habría revelado que tenía intenciones de separarse, porque él podía "sacar las garras" y hasta sería capaz de matarla.

*A la fecha, en Chile se registran 6 femicidios consumados y 18 femicidios frustrados, según el sitio web del Sernameg.