Violencia, asesinatos y ajustes de cuentas a plena luz del día: Bandas criminales se disputan territorio en Iquique

¿Qué pasó?

En lo que va del año, 48 bandas criminales han sido desarticuladas en Iquique, región de Tarapacá. Sin embargo, este número y el accionar de la policía no ha detenido a delincuentes y homicidas que disputan territorio en pleno centro de dicha ciudad. Por ello, fiscales alegan que la situación está descontrolada.

La inmigración como factor

Con palos, cuchillos y fierros es que bandas organizadas del crimen se enfrentan a plena luz del día en el centro de Iquique a vista de vecinos e incluso automovilistas que circulaban por el lugar. Este tipo de hechos son grabados por las cámaras de seguridad, convirtiéndose en postal obligada de la localidad.

Este tipo de hechos, según el alcalde de Iquique, Mauricio Soria, aumentaron considerablemente por la entrada de migrantes a territorio nacional. Pese a ello, valora el trabajo hecho por la policía hasta ahora.

"Hay miedo por los hechos violentos que han aumentado y se ha disparado la cifra. Hay un trabajo y que está dando resultados de las policías, quizá no se puede evitar, pero se persiguen. Ya hay detenidos", señala el edil.

Asimismo, asegura que "esto vino de la mano con el descontrol del Estado de Chile por el tema de las fronteras y dio pie a que el crimen organizado se instalara porque encontraron terreno fértil".

Las cifras que maneja Carabineros que es que solamente en la región de Tarapacá los delitos siguen siendo liderados por chilenos, con un 65% de la totalidad. El resto lo protagonizan extranjeros, siendo en su mayoría bolivianos, venezolanos y colombianos.

"La migración ha influido con lo que tiene que ver con la arista y los homicidios y hay modus operandi que antiguamente no se veían", añade el subprefecto Cristian Sayago.

Ajuste de cuentas

Estas bandas criminales se dedican, en su mayoría, al tráfico de drogas, robo de vehículos y asaltos. Pero, cuando los intereses se cruzan, lo resuelven en las calles de la región.

Fue el 10 de mayo de este año cuando ocurrió algo similar. La banda de los Chitoman se enfrentó con Los Giussepes, dando muerte a uno de los integrantes de esta última, víctima identificada como Joel Silva.

"Este homicidio que ocurrió en mayo, venía probablemente de algún evento que ocurrió semanas antes con el fallecimiento de otro joven. Luego, se cometieron otros homicidios posteriores que tienen que ver con la banda rival del fallecido. Es una dinámica que no termina y que ya perdieron de vista por qué se generó", explica el fiscal de Iquique, Eduardo Ríos.

Situación fuera de control

Para poder controlar esta situación, desde Carabineros han optado por estrategias que implican "copar" los lugares más conflictivos de la zona con mayor dotación policial.

No obstante, fiscales alegan que esto no es suficiente y aún se requieren mayores recursos para poder enfrentar esta situación que, de no actuar ahora, podría traer graves consecuencias para después y un colapso mayor al que se vive actualmente.

"Si llegan recursos materiales, la pregunta es cuándo llegan. Ojalá, por mí, lleguen mañana. Si estos recursos no llegan ahora, en seis meses la cifra (de delincuencia y homicidios) será fatal. Si llegan recursos, debe ser ahora, esto no puede esperar más", asevera el fiscal Ríos.