El esperanzador presente de la recordada "niña afgana" 36 años después de convertirse en un símbolo a nivel mundial
Sharbat Gula es el nombre de la recordada "niña afgana" que fue portada de la destacada revista National Geographic en junio de 1985 y que al mismo tiempo impactó a los lectores por sus profundos ojos verdes, que incluso llegaron a convertirse en un símbolo de las víctimas de la guerra en Afganistán.
La imagen sin duda era potente, puesto que resaltaba su rostro enmarcado por un pañuelo en la cabeza y también su mirada, razón por la cual se convirtió en una verdadera celebridad durante aquella época, consigna Infobae.
La persona encargada de fotografiar a la pequeña fue Steve McCurry, cuando ella vivía en un campo de refugiados en la frontera entre Pakistán y Afganistán.
¿Cuándo se conoció su identidad?
Sin embargo, su identidad se conoció recién en 2002, cuando el fotógrafo decidió regresar a esa región y logró finalmente localizarla.
En paralelo, la vida de Gula estuvo marcada por difíciles momentos, tanto así que en este jueves se confirmó que fue evacuada a Italia, donde espera una vida mejor con 49 años de edad.
Esta medida se llevó a cabo "como parte del programa más amplio de evacuación de ciudadanos afganos y del plan del gobierno para su recepción e integración", se indicó en un comunicado.
Las razones de la evacuación de Gula
Según el propio gobierno italiano, la salida de la mujer se concretó una vez que ella pidiera ayuda para poder salir de Afganistán luego de la conquista del país por parte de los talibanes en agosto de este año, que causó conmoción a nivel internacional.
Desde la oficina del primer ministro, Mario Draghi, se señaló que la fotografía de Gula llegó a "simbolizar las vicisitudes y el conflicto del capítulo de la historia que Afganistán y su pueblo estaban atravesando en ese momento".
De acuerdo a lo anterior, se sostuvo que se habían recibido solicitudes "de quienes forman parte de la sociedad civil y, en particular, de organizaciones sin ánimo de lucro que trabajan en Afganistán".
Ahora, luego de llegar a Roma en calidad de refugiada, Sharbat Gula, lejos de ser una niña, espera una vida nueva, lejos del sufrimiento y angustia que ha marcado a muchos en Afganistán.
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