Más de 500 niños del coro católico de una catedral en Alemania fueron víctimas de abuso sexual y maltrato físico
Este martes, se dio a conocer el informe final del caso de abusos a niños del Regensburger Domspatzen, en coro católico de la catedral de Ratisbona, en Baviera (Alemania). En él, se detalla que al menos 547 niños, entre 1945 y 1990, fueron víctimas de maltratos que iban desde privación de alimentación y golpes, hasta agresiones sexuales y violación.
Ulrich Weber, abogado y encargado de la investigación de este caso desde que estalló en 2010, aseguró que 500 niños sufrieron maltrato físico y 67 agresiones sexuales, incluyendo violaciones, según consignó AFP.
Cabe mencionar que en enero de 2016 se habló de 231 víctimas y en febrero de 2015 las autoridades católicas habían reconocido a 72.
Las víctimas, según el abogado, describieron su paso por el coro fundado en 975 como "una prisión, un infierno y un campo de concentración" y dicen que fue "el peor momento de su vida, marcado por el miedo, la violencia y la angustia", declaró Weber.
A pesar de que el abogado en su informe identificó a 49 personas con alta probabilidad de haber incurrido en estas prácticas, de las que nueve perpetraron agresiones sexuales, no espera que enfrenten cargos penales, debido a que los cargos estarían prescritos.
Además, señala que en el seno del coro existía una "cultura del silencio".
Y apunta, específicamente, a quien fuera director del coro durante 1964 y 1994, monseñor Georg Ratzinger, quien además es el hermano mayor del Papa Emérito Benedicto XVI, a quien "se le reprocha haber mirado para otro lado y no haber tomado medidas".
Ratzinger, de 93 años, ha asegurado que no tuvo conocimiento de los abusos.