¿No puedes dormir? Estos son los principales trastornos del sueño que podrías tener

¿Eres de las personas que le cuesta conciliar el sueño, ronca o al despertar, sientes que estás cansado o de mal humor? La explicación para todas estas alteraciones en tu salud podría ser un trastorno del sueño.

La neuróloga de Clínica Las Condes, Dra. Evelyn Benavides explica que “una persona adulta requiere entre 7 y 8 horas de sueño, para restaurar las funciones del organismo”. Sin ese tiempo de descanso, aumenta considerablemente el riesgo de presentar trastornos del sueño y, en casos extremos, desarrollar problemas cognitivos e incluso infartos al corazón.

¿Cuáles son los principales trastornos?

Algunas de las patologías más recurrentes en el país son:

• Apnea del sueño: patrones anormales en la respiración durante la etapa de sueño, interrumpiendo el sueño profundo, asociados a ronquido y somnolencia en el día.
• Insomnio: dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido o despertar antes de la hora habitual.
• Narcolepsia: somnolencia extrema o trastorno crónico del sueño durante el día, asociada a parálisis del sueño, alucinaciones al despertar o iniciar el sueño y, ocasionalmente, perdida del tono muscular en relación con emociones como risa o miedo.
• Síndrome de las piernas inquietas o enfermedad de Willis-Ekbom: impulso de movilizar las piernas al tratar de dormir, así como sensaciones de hormigueo, ardor y comezón de predominio vespertino, y que disminuye al mover las piernas o ponerlas en alguna superficie fría.

Estudios han mostrado que la calidad de vida mejora considerablemente si dedicáramos el tiempo suficiente a tener un sueño reparador.

¿Qué pasa si no duermo lo suficiente?

“Las personas deben tomar conciencia acerca de la importancia del sueño en la salud física y mental”, enfatiza la neuróloga CLC. De lo contrario, algunos de los efectos y consecuencias de la mala calidad de sueño pueden ser:

• Mal control de la diabetes.
• Aumento de la presión arterial e inflamación, que pueden generar aumento en el riesgo de infartos al corazón o cerebro.
• Obesidad.
• Baja en el sistema inmune con aumento de riesgo de infecciones.
• Ansiedad.
• Trastornos del ánimo.

¿Cómo puedo mejorar mi sueño?

De ahí la importancia de tener hábitos saludables del sueño. Por eso, la especialista recomienda tener una buena alimentación y actividad física y, para ello, se pueden seguir los siguientes consejos:

• Mantener un horario definido para dormir, privilegiando la noche para descansar y el día para realizar el resto de las actividades.
• Trata de usar ropa cómoda y fresca y asegúrate de que la habitación tenga una temperatura agradable.
• Evitar las siestas, y si es muy necesario que dure menos de 30 minutos y antes de las 16 horas.
• Evitar comer o hacer ejercicios 2 a 3 horas antes de ir a dormir.
• Evitar la ingesta de bebidas como el café, el té, chocolate o alcohol, al menos 2 horas antes de dormir.
• Evitar el uso de pantallas en la noche al menos 1 hora antes de dormir.
• Evitar la automedicación de pastillas para dormir porque pueden ser aún más perjudiciales si no se conoce el origen del trastorno del sueño.

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