Robaron hasta la losa del piso: Vandalizan gruta de Sophie, bebé asesinada por su padre en Puerto Montt en 2018

¿Qué pasó?

Al norte de Puerto Montt, en la región de Los Lagos, está la localidad de Alerce, en donde ocurrió un brutal crimen a principios de 2018. Con casi dos años de edad, la pequeña Sophie fue asesinada por su padre después de sufrir constantes abusos, lo que remeció al país entero.

Para que el rostro de la pequeña permaneciera en la memoria de los residentes, el movimiento "Justicia para Sophie" levantó una gruta en su recuerdo, la que recientemente fue vandalizada y destrozada por desconocidos, quienes se llevaron hasta la losa del piso.

Lo único que quedó intacto fue la parte de la estructura que retrata la cara de la menor, la que fue reubicada en la feria Lagunitas para su mayor resguardo.

"Barrieron con la gruta de Sophie"

El vocero de la feria e integrante del movimiento, Marco Hernández, detalló que "la gruta fue destrozada. Se robaron todos los implementos que le teníamos nosotros: vírgenes, rejas, se llevaron hasta la losa del piso. Barrieron con la grutita de Sophie".

Según manifestó a Soy Chile, "optamos por llevar lo que quedaba. Lo único es su rostro, una estructura que pesa como 70 kilos. Ahora está bien cuidada y protegida" en el recinto ubicado a un costado de la ruta Ch-226.

Para evitar que vuelva a ocurrir una tragedia de la magnitud de este brutal crimen, Hernández adelantó que construirán un altar para la bebé: "Nosotros optamos por tenerla acá, cuidarla y proteger su imagen para que muchos no se olviden de lo que pasó con ella".

El brutal asesinato de Sophie

El 25 de enero de 2018, Francisco Ríos llegó hasta el Cesfam de Alerce con su pequeña hija en sus brazos. Ante la horrorizada mirada de los médicos, él aseguró que la niña se había caído y perdido el conocimiento. El personal de salud intentó reanimarla, pero de nada sirvió: Sophie llegó sin vida al recinto.

Con el paso de los días, se supo que la verdadera causa de muerte fue asfixia por estrangulación, no la supuesta caída que señaló su padre, quien fue sindicado como el autor de las lesiones por quemaduras que la bebé tenía en sus brazos y muñecas, y de su asesinato.

Uno de los médicos que recibió a la niña ese día, Juan Eduardo Donoso, testificó en el juicio oral contra Ríos, manifestando que "la muerte de Sophie es sólo la punta de un gran iceberg (...) Una lactante cruelmente violentada, hasta el punto de causar su muerte".

La madre de la víctima y entonces pareja del asesino también declaró en la instancia judicial. Según señaló, la muerte de la infante ocurre en un contexto de violencia intrafamiliar contra la mujer, tratándose de hechos de violencia física y psicológica que se hicieron frecuentes en los días anteriores al crimen.

Según lo consignó la fiscal Ingrid González, la afectada indicó que "jamás se imaginó que el padre de su hija la estaba maltratando físicamente y que iba a terminar matándola, eso es algo que nunca ella pudo prever". Tampoco sospechó de las quemaduras de cigarrillo que Sophie tenía en sus brazos o de las lesiones que sufría, ya que Ríos "siempre tenía una justificación".

En octubre de 2019, el sujeto fue condenado a presidio perpetuo calificado por ser autor del delito de parricidio, por lo que pasará 40 años tras las rejas, sin poder acceder a beneficios carcelarios.

Si bien su defensa intentó anular el juicio a principios de 2020, la Corte de Apelaciones de Puerto Montt ratificó la condena emitida por el Tribunal Oral en lo Penal de Puerto Montt.

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