Emprendedores crean ositos gominolas pero con alcohol

El conflicto se ha originado por el presunto parecido entre las golosinas de una pyme española -creada hace un año por tres estudiantes de Bilbao, en el País Vasco-, y las conocidas gominolas de la empresa Haribo.

La diferencia es que la creada por los estudiantes tienen un leve nivel de alcohol y las fabricadas por la empresa alemana no lo poseen, lo que ha provocado la molestia de los germanos.

El producto puede encontrarse en multitud de comercios de varios países europeos, así como de Estados Unidos, Brasil, China, Japón o Australia.

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La historia de los “Ositos borrachos”

Ander Méndez estaba muy feliz con el negocio que montó con dos amigos: vender gominolas en forma de ositos, rellenas de alcohol. Un negocio que iba bastante bien hasta que el gigante alemán Haribo se cruzó en su camino.

Tras el inicio de la producción de este grande de los negocios, los dueños de la pyme afirman estar"asustados" porque, según ellos, "si quiere nos hunde". A pesar de este temor, aseguran que continuarán la producción y comercialización de sus "ositos borrachos", porque "vemos que a la gente les gusta".

A pesar de que Haribo creó unas gomitas similares a las de estos emprendedores, las de ellos no tienen alcohol. "Como es habitual en estos casos, Haribo ha lanzado el procedimiento jurídico para proteger las marcas registradas", se limitó a decir una portavoz de la empresa, contactada por AFP.

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Términos legales

Ander Méndez, CEO de "Ositos con alcohol", cuenta el susto que se llevó cuando hace dos semanas recibió en casa el burofax de un bufete de abogados contratado por Haribo. "Se me cayó el cielo en ese momento", cuenta a AFP este muchacho de 24 años, licenciado en Ingeniería.

El documento, redactado en inglés y consultado por la AFP, sostiene que hay una "gran similitud" entre ambos productos, lo que a juicio de Haribo constituiría una vulneración de sus derechos de propiedad intelectual.

Es por esto que la gigante empresa propone a los tres jóvenes empresarios vascos, solucionar "amistosamente" el diferendo con medidas drásticas.

Entre ellas, la carta enumera en tono expeditivo: dejar de producir y vender "cualquier producto bajo el símbolo en disputa", "destruir y dejar de enviar cualquier tipo de catálogo en papel u online", abandonar su marca registrada en España, "retirar los productos de su web", y sobre todo, aceptar firmar los documentos que presenten sus abogados para "transferir la gestión y propiedad del dominio ositosconalcohol.com" a Haribo.

Pero ¿realmente se parecen los productos?

"Ni le estamos haciendo daño a su marca ni se parecen" los ositos, por cierto más grandes que los de Haribo, replica indignado Ander Méndez, quien acusa al grupo alemán de querer "apropiarse" de su creación.

Al parecer, esta no es la primera vez que la empresa Haribo hace este tipo de “jugadas”. En 2012, emprendió acciones legales contra la empresa suiza Lindt, por considerar que sus ositos de chocolate, huecos por dentro y envueltos en papel dorado, eran una imitación de su producto.

Sin embargo, al término de una larga batalla legal, un alto tribunal alemán falló en 2015 a favor de Lindt, y dictaminó que sus osos de chocolate no podían ser confundidos con las gominolas de Haribo.