Estrés postvacacional: Recomendaciones para enfrentarlo

  • Por Paulina Cepeda Araya

La inminencia de marzo asociada al regreso al trabajo y/o estudios, gatilla el retorno de una serie de factores que inciden en la psiquis de gran parte de la población en forma negativa.

 

Las cifras lo demuestran. Según Ángel Seara, gerente general del laboratorio Axon Pharma: "Se proyecta que este mes en promedio aumente entre un 25 y 30 por ciento el consumo de ansiolíticos respecto a febrero, de acuerdo a la experiencia de años anteriores".

 

Las personas que padecen síndrome postvacacional sienten rechazo al trabajo en forma de tristeza, agitación, ansiedad, agobio, nerviosismo o irritabilidad. También se puede presentar alteraciones físicas, como fatiga, falta de apetito, somnolencia, dolores musculares y cansancio.

 

Si la sintomatología no desaparece en unos diez o quince días, se aconseja consultar a un especialista.

 

Para Mónica López, psicóloga clínica y directora del Instituto del BienEstar: “Si bien los síntomas más intensos pueden ir cediendo con el tiempo, algunos pueden ser una clara señal de que en vacaciones tomamos cierta distancia de nuestra forma de vida habitual. En este sentido, si los síntomas persisten, es importante plantearse si el modo en que estoy viviendo mi día a día es el modo en que quiero vivir mi vida”.

 

Según la Asociación Chilena de Seguridad, las estadísticas internacionales arrojan que más del 35% de la población trabajadora sufre de síndrome postvacacional, que afecta principalmente a los menores de 45 años.

 

Recomendaciones de los expertos:

 

- Continuar alguna actividad física iniciada en verano o comenzar un régimen de ejercicio moderado y frecuente.

 

- Concentrarse en lo positivo, rescatar lo bueno de las vacaciones y también los aspectos que le gustan y que lo motivan de la vida cotidiana.

 

- Usar técnicas de relajación, hacerse masajes, meditar o practicar yoga, que otorgan beneficios físicos y emocionales.

 

- Valorar y aprovechar los fines de semana, son la mejor oportunidad para desconectar del trabajo hasta que se vuelva a tener otro periodo de vacaciones.

 

- Durante las horas de trabajo buscar momentos de pausa para reactivar la respiración, variable esencial en los procesos de control del estrés y la ansiedad.

 

- Hacer estiramientos en la oficina o paseos cortos. Cuando se comienza a sentir tenso, lo mejor es realizar algún ejercicio de relajación para volver a un estado más tranquilo.

 

-  Redecorar el espacio laboral con objetos que provoquen pensamientos positivos, incorporar muebles ergonómicos y accesorios que aumenten la comodidad en el trabajo.

 

Si a pesar de todo lo anterior se presenta este problema, la ayuda de un especialista debe ser requerida.