¿Dejaste pasar un año para visitar a un dentista? Descubre si padeces de una de las enfermedades bucales más frecuentes
La pandemia agudizó la falta de atención de las personas sobre su salud bucal, y si bien se han retomado las consultas ambulatorias de diversas especialidades, estas parecen no ser prioridad para los chilenos.
Las anomalías bucales son las enfermedades crónicas más comunes y constituyen un importante problema en la salud pública, tanto por su alta prevalencia como por su impacto en las personas y el alto costo del tratamiento. De hecho, se estima que el 25% de las listas de espera corresponden a atenciones odontológicas, las cuales se derivan de enfermedades como caries o gingivitis, especialmente en los sectores de menos recursos.
Según cifras del Colegio de Dentistas, la consultas dentales no han retomado los niveles pre pandemia y la falta de procedimientos preventivos en niños y para tratar enfermedades en adultos, podría desencadenar un serio problema en la población.
El control rutinario para combatir las afecciones
Para aclarar el escenario que puede desencadenar el descuido de la salud dental, la académica de la Facultad de Odontología de la Universidad San Sebastián, Helia Mussiett, explicó que las patologías bucales más prevalentes en el mundo, así como en nuestro país, son: la enfermedad de caries, las enfermedades gingivales y periodontales, y las anomalías dentomaxilares. Estas se inician desde los primeros años de vida y presentan un importante incremento con la edad, por lo que, los chequeos preventivos cobran especial relevancia para combatir dichas afecciones.
"El control rutinario, es decir, al menos una vez al año, es ideal para mantener alejadas las enfermedades bucales de mayor prevalencia", enfatizó Mussiett.
Patologías que pueden convertirse en enfermedades crónicas
Desde el 2000, la salud bucal fue priorizada por el Ministerio de Salud dentro de los objetivos sanitarios de la década, enfocándose en dos pilares de impacto en esta materia. Uno alude a la disminución de las caries en menores de 20 años, meta que se cumplió y, el otro, se relaciona con el aumento de la cobertura de la atención odontológica en los menores de 20 años. Este último no logró cumplirse en la fecha pronosticada, sin embargo, se continúa trabajando para llegar a ese propósito.
"Esto nos confirma que aún tenemos muchos desafíos en salud bucal en nuestro país. Por ejemplo, según estudios nacionales disponibles, a los dos años, la prevalencia de caries es de un 17,5%, mientras que a los cuatro años es de 49,6% y de 70,4% a los seis. La prevalencia de caries a los 12 años es de 62,5%, aumentando con la edad hasta llegar a un 99,4% en adultos de 65 a 74 años. Y por su parte, la enfermedad periodontal afecta sobre el 90% de la población mayor a 35 años", explicó la académica de la USS.
En consecuencia, no controlarse de forma periódica, puede traer graves consecuencias para la salud de las personas como, por ejemplo, un dolor agudo causado por una carie o un compromiso grave del estado general asociado a un proceso infeccioso de origen bucal, lo cual podría, incluso, poner en juego la vida del paciente.
Helia Mussiett aseguró que la salud bucal es igual de importante que la salud física de una persona, ya que, en ambos casos, las consecuencias pueden ser perjudiciales. "La salud bucal es reconocida como una de las prioridades de salud del país, tanto por la prevalencia y severidad de las enfermedades bucales como por la mayor percepción de la población frente a estas patologías que afectan su salud general y su calidad de vida. Un problema de salud bucal puede ser grave de no ser tratado, sobre todo en pacientes con compromiso sistémico de base", enfatizó Mussiett.