Logo Mega

Este aviso se cerrará en segundos

La diabetes lo dejó ciego y años después logró conocer a su hijo tras recuperar la visión

Fabián Richetti fue diagnosticado con diabetes tipo 1 cuando apenas era un adolescente, teniendo 14 años de edad. Desde entonces, ha sufrido diversas afecciones debido a esta enfermedad, hasta perder la visión.

El hombre oriundo de Santa Fe, Argentina, cuenta en conversación con TN que debió mudarse a Rosario para iniciar un tratamiento contra la diabetes a temprana edad.

"Al principio no entendía bien lo que pasaba, pero con el tiempo descubrí que la diabetes traía muchos problemas de salud y que se necesitaban grandes cuidados. Siendo tan chico aprendí a aplicarme las inyecciones e insulina", recordó el hombre.

"Me quedé ciego"

Al crecer, los problemas a causa de la diabetes fueron aumentando, afectando de forma severa su vista. A los 18 años se acentuaron y fue cuando decidió visitar a distintos especialistas.

"Fui a un médico y me indicó un tratamiento con rayo láser. Fueron 2700 disparos de láser por ojo. Una locura. Aún me cuesta creer cómo soporté tanto. A pesar de todo, nunca bajé los brazos", afirma, pero su vista no mejoró.

Luego, sus riñones fallaron y llegando al 2006, quedó completamente ciego. Trabajando en una verdulería, es que vivió un momento de terror cuando estaba en su puesto de cajero.

"Vino una señora y me pidió una bolsita de papas, me di vuelta para dársela y no vi más. ‘Me quedé ciego. No veo’, le grité desesperado a mis compañeros", recuerda.

“Fue un día muy duro y difícil para mí. Pasaron los días, pasaron los años y en todo ese tiempo agudicé el olfato y el oído. No tenía otra opción. Fue muy triste para mí no poder verle la cara a mis hijos”, lamenta.

¿Cómo recuperó la visión?

Con el pasar de los años, Fabián estaba en la lista para recibir un trasplante de páncreas y riñón, lo que finalmente recibió y derivó en la mejora de su enfermedad. Con ello, existía la posibilidad de recuperar la vista.

Con la visita de un oftalmólogo, este le prometió que le devolvería la vista. Fue así como cuatro años pasaron y el 14 de septiembre del 2010, la vista regresó.

"Era martes y mi hijo más grande cumplía 18 años. Unos días después pude ver las luces. La cara de mi mamá que me acompañó en todo momento. Había soñado con ese día y al fin se había hecho realidad", recuerda emocionado.

Fue así como pudo conocer a su cuarto hijo Ezequiel, quien nació cuando ya había perdido completamente la visión: "La ceguera me hizo valorar la vida y disfrutar de cada día".

Todo sobre Mundo

Leer más de