Zoológico deberá indemnizar a familia luego que un oso hormiguero matara a su hija

Melisa Noelia Casco tenía 19 años de edad cuando murió producto de las heridas que le ocasionó un oso hormiguero, tras un ataque que se produjo en el Zoológico de Florencio Varela, Provincia de Buenos Aires, Argentina, lugar en el que se desempeñaba como cuidadora de animales.

Pese a que su muerte ocurrió en su lugar de trabajo y a causa de la falta de seguridad, pues no contaba con los elementos necesario para realizar sus labores, los dueños del espacio de recreación alegaron que lo sucedido fue culpa de la joven por "exceso de confianza" y porque “se expuso indebidamente, sin autorización de su empleadora".

Trece años después, y luego que su familia perdiera la fe en que se hiciera justicia, un tribunal laboral condenó a los responsables y obligó a pagarles 101 millones de pesos argentinos de indemnización (poco más de 900 millones de pesos chilenos) por lo ocurrido aquel 10 de marzo de 2007, consignó el diario Clarín.

"Ramón era agresivo"

La bióloga Cecilia Diminich, quien trabajó en el lugar durante poco más de un año, denunció que "Ramón era agresivo y las autoridades del zoo lo sabían".

De hecho, y de acuerdo a declaraciones a las que tuvo acceso el diario argentino, Diminich había sido, igualmente, víctima del animal que le rasguñó la pierna en una oportunidad.

Cuando denunció el hecho ante sus patrones, "lo minimizaron, e hicieron chistes, expresando que seguramente el oso la había atacado porque ella estaba indispuesta".

A partir de entonces, la tarea de atender a "Ramón" quedó a cargo de Melisa, quien había entrado a trabajar en julio de 2005 como "guía educativa" y en enero de 2007 pasó a ser cuidadora de animales, sin haber sido capacitada.

"Fallo ejemplar"

Una vez que se dio a conocer la medida del tribunal, Fernando Burlando, abogado de la familia, afirmó: "Es un fallo ejemplar y sin precedentes para la Provincia".

Sostuvo que "estos son los actos que a uno le generan esperanza" y que "es la primera vez que un tribunal, en 12 años, le dio una respuesta" a los padres de Melisa, Eduardo Alberto Casco (66 años), quien padece depresión reactiva crónica luego de la muerte de su hija, y Marta Susana Lago (65).

Por su parte, Juan Ignacio Orsini, uno de los jueces que llevaba el caso, señaló: "Estimo que, con la prueba producida en la causa, quedó claramente acreditado que la empleadora vulneró el deber de seguridad e incurrió en una conducta negligente causalmente vinculada con el accidente que le costó la vida a la joven Melisa Casco". 

Cabe señalar que el 14 de abril de 2014, el propietario del zoológico, Claudio Alejandro Quagliata, fue condenado a tres años de prisión en suspenso y 7 años de inhabilitación para estar en cualquier sociedad relacionada a los zoológicos, por "homicidio culposo". Pero ocho meses más tarde la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de Quilmes revocó la sentencia y lo absolvió.