Orina espumosa: Estas son las posibles causas que pueden provocar este síntoma

La presencia de espuma en la orina puede generar preocupación, sin embargo, si esto ocurre de manera ocasional, no debería ser un signo de alerta, ya que existen diversos factores que pueden provocarla, como la presión y la velocidad con la que sale de la uretra.

Por el contrario, si llegase a ser un síntoma habitual, lo mejor es consultar con un especialista y puede que sea necesario solicitar un análisis de orina, puesto que puede ser una señal de infecciones urinarias.

El organismo siempre busca la manera de manifestarse cuando algo anda mal y esta es una de sus vías predilectas. Desde Clínica Mayo, señalan que una de las posibles causas de espuma en la orina son los niveles altos de proteína, que se denomina proteinuria.

Esta afección suele advertir que la persona padece algún problema renal. Según el sitio Manual MSD, es fundamental detectarlo cuando antes, puesto que "la presencia de proteínas en la orina es tóxica para el riñón y puede causar daños renales".

Otras posibles causas de la orina espumosa

Cálculos renales 

Los cálculos renales son depósitos duros, similares a una piedra, compuestos por minerales y sales que se forman dentro de los riñones. Suelen aparecer en personas que ingieren poco líquido, ya que los minerales presentes en la orina se concentran y cristalizan.

Las señales en la orina que pueden alertar de esta enfermedad es la presencia de sangre, el mal olor y la consistencia turbia. Además, uno de los síntomas más molestos es la sensación de ardor al orinar.

Presión arterial alta

Se le conoce como el "asesino silencioso", porque no genera síntomas como otras condiciones. Las personas pueden tener graves problemas de presión arterial, sin enterarse, hasta que escala a un problema de salud mayor.

La presión sanguínea mide cómo fluye la sangre por las venas y las arterias. Una buena presión permite que esto ocurra de forma fluida, manteniendo la buena salud de los órganos. Pero cuando las arterias se tapan o se dañan, aumenta la presión arterial, elevando las probabilidades de tener enfermedades al corazón, accidentes cerebrovasculares y problemas en los riñones.

Preeclampsia

La preeclampsia es una complicación del embarazo que se caracteriza por una presión arterial elevada. De no tratarse, puede llegar a ser mortal tanto para el bebé como para la madre. "Se presenta en alrededor del 3 a 7% de todos los embarazos. Se piensa que la afección empieza en la placenta”, determina MedlinePlus.

Infección urinaria

Cuando las bacterias se alojan en el tracto urinario, esto da lugar a una infección urinaria que puede generar múltiples molestias, entre ellas, ardor al ir al baño, ganas constantes de orinar, y la presencia de sangre y/o espuma. 

En caso de que los patógenos lleguen hasta el riñón, los síntomas podrían aumentar, y manifestar fiebre, escalofríos, dolor en la espalda baja o los costados de la espalda baja, junto a vómitos o náuseas.

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