"Pensé que era un bombazo": Habla testigo de accidente en el que murieron tres amigas en 10 de Julio

¿Qué pasó?

La madrugada del lunes las amigas Millaray Rojas (25), Esmeralda Reyes (26) y María José Mayanes (37) perdieron la vida tras chocar a alta velocidad en contra de un local comercial de la calle 10 de Julio en el centro de Santiago.

"Cuando me pasaron deben haber ido a unos 80 kilómetros por hora", aseguró a Las Últimas Noticias (LUN) Rodrigo Rojas, quien segundos antes del impacto divisó al KIA de color rojo donde viaja este grupo de tres amigas.

Ir a la siguiente nota

"Un auto me pasó muy rápido por mi derecha"

Eran casi las 12 de la noche del lunes y Rojas se trasladaba hacia el poniente desde avenida Irarrázaval. Tras cruzar Vicuña Mackenna tuvo el primer contacto con el vehículo de las amigas que venían de un concierto: "Cuando recién empezaba a avanzar por 10 de Julio un auto me pasó muy rápido por mi derecha".

"Yo de hecho me corrí un poco hacia la izquierda cuando sentí que venía el auto desde atrás, porque sonaba fuerte y lo vi por el espejo retrovisor. Cuando me pasaron deben haber ido a unos 80 kilómetros por hora", rememoró el ingeniero mecánico automotriz.

LO ÚLTIMO

Segundos después de esto, las amigas chocaron directamente con el muro de un local ubicado en 10 de Julio con Manuel Antonio Tocornal. "Ellas chocaron como unos 10 segundos después de pasarme", sostuvo Rojas.

"Pensé que era un bombazo"

"El auto pasó el colegio que está por ahí y un poco después escuché como un bombazo. Avancé un poco más y me encontré con la tremenda polvareda", dijo sobre el impacto.

Antes de llegar al lugar del choque, el hombre dijo que no creyó que el auto que lo había sobrepasado se había accidentado "porque sonó muy fuerte y generalmente cuando un auto choca, antes uno escucha la frenada (...). Cuando escuché el ruido pensé que había explotado un transformador o que era un bombazo".

"Cuando me fui acercando vi que había un auto incrustado y ahí sí me acordé del auto que me había pasado. Solo se veían las luces encendidas en medio del polvo", explicó.

Rodrigo Rojas dijo que tras esto no bajó de su vehículo, porque "sentí que no había nada que hacer. Ya había gente tratando de ayudar. Asumí que las personas habían muerto, era una escena dura".

"Ahí pensé 'de la que me salvé'. Quedé con susto, porque perfectamente el auto me podría haber pescado a mí o a uno de los autos que iban un poco más adelante mío", cerró.