Inmobiliaria a cargo de importante proyecto en Chicureo busca evitar su quiebra: ¿Qué los llevó a esta crisis?

¿Qué pasó?

Un procedimiento de reorganización judicial con miras a evitar su quiebra es el proceso que está llevando la inmobiliaria El Chamisero, compañía que está a cargo de uno de los mayores proyectos para viviendas de Chicureo.

De hecho, en el documento presentado a la justicia se hace hincapié en que la iniciativa busca transformar "más de 300 hectáreas rurales, en una próspera comunidad residencial y comercial, generando un nuevo foco de desarrollo para la comuna de Colina".

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A pesar de que también se subraya que este proyecto cuenta con diversas inversiones, aportadas por distintos actores, generando una gran cantidad de puestos de trabajo, la compañía atraviesa un complejo panorama económico que lo tendría cerca de irse a la quiebra.

Las razones del complejo momento de El Chamisero

A la hora de abordar los factores que decantaron en este escenario se destaca que "como consecuencia del denominado 'estallido social' el año 2019 y los efectos de la posterior pandemia mundial de COVID-19, hasta el año 2022, se produjo un alza sostenida en los precios de los materiales de construcción y un aumento récord de las tasas de los créditos hipotecarios".

De acuerdo a lo que se establece, estos factores, a la fecha, "han generado una importante crisis en el sector inmobiliario y de la construcción. Esta crisis ha implicado una baja considerable en la compra de viviendas y una notoria desaceleración en la inversión inmobiliaria del mercado actual".

"Los factores señalados han sido determinantes en la situación actual de Chamisero Inmobiliaria S.A, cuyos flujos de caja se han visto fuertemente afectados ante la desaceleración del mercado, lo cual se han traducido en una disminución en ingresos por venta para la empresa de por más de 1 millón de UF", se agrega.

En esa misma línea, se estipula que actualmente los proyectos en desarrollo de la compañía se encuentran prácticamente paralizados ante la baja demandas de viviendas en el sector, lo que se suma a la baja de financiamiento.

Todos esos antecedentes han llevado a que la empresa acumule una deuda que asciende, aproximadamente, a 2 millones de UF, aunque aseguran que "a la fecha todas las obligaciones de carácter laboral y previsional se encuentran al día y sin deudas".

Medidas para salir del complejo escenario y el optimismo de la empresa para lograrlo

Para sortear con éxito esta problemática se apunta a que "conscientes de la necesidad urgente de generar ingresos y mejorar su liquidez, se han llevado a cabo diversas medidas para estimular las ventas y atraer nuevos socios comerciales. Sin embargo, estos esfuerzos se han enfrentado a múltiples debido a la persistente crisis económica e inmobiliaria, así como el elevado costo de créditos y contribuciones".

Dentro de las estrategias empleadas se encuentra, por ejemplo, "importantes campañas de venta de macrolotes con rebaja de precios", además de la búsqueda de colaboración en proyectos conjuntos con significativos actores del mercado.

A pesar de no tener el éxito esperado de momento, ven factible el poder revertir el panorama, pues la compañía, dice el documento, "tendría una excelente proyección a futuro si logra reestructurar su pasivo, debido a su larga trayectoria y reputación las que le han permitido consolidarse como un importante actor en el desarrollo urbano de Chicureo".