Cardenal Ezzati y abusos sexuales: "Cada caso conmueve y duele profundamente, sobre todo con menores"

"Estoy convencido que esta crisis que vive la Iglesia es justamente un regalo de Dios para mejorar, para transformar y convertirse de lo que son las limitaciones humanas, pecaminosas, propias de la persona humana". 

Con esas palabras, el cardenal Ricardo Ezzati resumió su parecer respecto a la situación actual que atraviesa la Iglesia Católica, con múltiples casos de abusos sexuales cometidos por religiosos en distintas partes del mundo y que en Chile sigue en desarrollo a través de los 148 casos que investiga el Ministerio Público, apareciendo el propio Ezzati en cuatro de los cuales como eventual encubridor. 

En entrevista con Ahora Noticias, el religioso abordó las diferentes acusaciones en su contra y sentenció que "no tengo absolutamente nada que ver con encubrimiento". 

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RENUNCIA AL ARZOBISPADO

Paralelamente, consultado por la decisión del Papa Francisco de aceptar su renuncia como Arzobispo de Santiago, Ezzati manifestó que "era una noticia que yo estaba esperando desde hace bastante tiempo, 2 años y meses", agregando que recibió la noticia con "serenidad y paz". 

Consultado sobre el porqué ahora fue aceptada su renuncia y no cuando la presentó al cumplir 75 años, el religioso manifestó que "no hubo un cambio de opinión del Santo Padre, simplemente es lo que se acostumbra hacer en estas ocasiones, la búsqueda de un sucesor no es fácil y a veces se demora un tiempo".

Al mismo tiempo, Ezzati descartó que la aceptación de su renuncia tuviera que ver con las denuncias en su contra. "El mismo Papa lo dijo en su carta donde explica que no tiene nada que ver. Aunque la prensa ha intentado unir la decisión de la corte con esto. Esto es una cosa normal en la sucesión apostólica", sostuvo.

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CASOS

Paralelamente, el religioso se refirió a los casos en los que aparece acusado, señalando que, por ejemplo, en el caso de Tito Rivera, apenas recibió la denuncia lo suspendió "de todos los oficios eclesiásticos, de la posiblidad de celebrar la eucaristía y los sacramentos, y se decretó la investigación previa. El 31 de enero yo envié a Roma las conclusiones de la investigación previa". 

Respecto a lo que sostiene Daniel Rojas, quien asegura que tras ser violado por el sacerdote Tito Rivera, Ezzati le habría hecho llegar $30 mil, el religioso sostuvo que "respeto a don Daniel, es un hombre al que hay que respetar en toda su dignidad, pero eso no es cierto".

KARADIMA

Consultado respecto al caso Karadima, el exarzobispo manifestó que "no tengo nada que ver, lo único que me tocó hacer fue denunciar lo que la Santa Sede había aprobado (...) Yo escuché el caso de Murillo, yo lo presenté al Arzobispo de la época y yo sé que él ha dicho en varias partes que fue bien acogido por mi".

Respecto al reciente fallo de la Corte de Santiago que ordena a la Iglesia a pagar $100 millones a cada víctima de Karadima, el religioso manifestó no tener "ninguna opinión adversa. Si la corte cree oportuno eso y las víctimas están de acuerdo se ejecutará. Siento que se ha pronunciado la Corte y tendrá sus motivaciones para hacer justicia".

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"LA PODA HACE LLORAR A LA PARRA"

Posteriormente, Ezzati sostuvo que "hubo crímenes, y muy dolorosos, el abuso de poder y sexual es un crimen y eso es verdad. Los primeros que sentimos eso, junto con las víctimas, somos quienes estamos más cerca de estos hechos. Los responsables de los crímenes son las personas que los cometen y en caso de que se dé esa figura de encubrimiento, por supuesto, quien lo encubre".

Junto a lo anterior, sostuvo que las denuncias tras la visita de monseñor Scicluna "no son casos recientes. Son casos de hace 15 a 20 años atrás y de los cuales qué conocimiento puede tener uno. Pero qué bueno que se dé luz a eso (...) la poda hace llorar a la parra".

"Cada caso conmueve y duele profundamente, sobre todo cuando se da con menores de edad. El dolor más grande de mi vida de sacerdote ha sido comprobar casos de abuso de menores, uno de ellos, el caso de Óscar Muñoz", agregó. 

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EL CELIBATO, EL ROL DE LA MUJER Y LA HOMOSEXUALIDAD EN LA IGLESIA CATÓLICA

En cuanto al Celibato, Ezzati aclaró que no es una obligación, y que bien la Iglesia Católica podría dejar de tener sacerdotes que se apeguen a aquella "vocación" en el futuro.

"El celibato es un don, no es obligatorio en el sentido de que la iglesia impone el celibato, sino que la Iglesia escoge para sus ministros a personas que tienen vocación para el celibato. No siendo un dogma de fe, esto puede cambiar y a lo mejor en los próximos años la Iglesia podrá reflexionar sobre esto".

En tanto, el cardenal destacó la labor de varias mujeres al interior de la Iglesia, señalando que ha tenido, sigue teniendo y tendrá en la Iglesia un rol fundamental. No obstante lo anterior, sostuvo que "sin duda alguna, en este último tiempo, la reflexión cultural respecto a la mujer, su dignidad, su rol, nos lleva a pensar mucho más en su rol en la Iglesia".

Finalmente, respecto a si hay homosexuales al interior de la Iglesia, Ezzati manifestó que "puede haber", aunque no mayoritariamente. "En absoluto, yo en eso soy testigo de la vida de tantísimo sacerdote dedicado plenamente a su ministerio. Pecadores como todos, pero no corruptos", cerró.