Colombiano se autosecuestró para no llegar a su propio casamiento

Aunque parezca insólito, es una historia real que ocurrió en el municipio Pitalito (Colombia) cuando un hombre, cuyo nombre no fue dado a conocer, planificó su secuestro para evitar llegar a la iglesia, donde se llevaría a cabo su propio casamiento.

55 años de edad tiene el sujeto que dejó a su prometida preocupada y con lágrimas en los ojos, mientras él era “secuestrado” por amigos que estaban cumpliendo su petición.

Cuando la novia y sus familiares se enteraron de lo que estaba ocurriendo, dieron cuenta a las autoridades para que buscaran al novio y lo regresaran a la brevedad posible.

El montaje perfecto para un autosecuestro

La historia de este caso comenzó el fin de semana pasado, 10 horas antes del matrimonio, cuando el novio confesó a sus amigos a través de un grupo de WhatsApp, que no quería contraer nupcias con su prometida. En ese momento planificaron su desaparición para evitar a toda costa el compromiso. Sin embargo, no todo salió como lo esperaban.

El montaje, antes de la intervención policial, era casi perfecto. La historia del secuestro fue creída por familiares y amigos, quienes al enterarse de la noticia, no pudieron evitar la preocupación.

"La novia, visiblemente preocupada, dijo que el matrimonio era en la noche y pidió el rescate sano y salvo de su prometido", señalaron las autoridades al diario El Tiempo.

“Se arrepintió y se escondió”

Cuando fueron informadas las autoridades sobre el caso de “secuestro”, comenzaron un arduo operativo de búsqueda. Las alarmas se encendieron por todo Pitalito e incluso se hizo un llamado de urgencia al Ejército.

"Al instante cerramos las vías de acceso al municipio para frenar la fuga de los delincuentes", afirmó el mayor Néstor Vargas, comandante de la Policía de Pitalito, quien además destacó que el cuerpo policial se vio obligado a realizar labores de inteligencia, con operativos en las calles del municipio y establecimientos comerciales.

Cuando los amigos del novio se dieron cuenta del gigantesco operativo de las autoridades en todo el municipio, confesaron que todo obedecía a un plan montado con anterioridad.

"Nos dijeron que se trataba de un autosecuestro, pues un amigo de ellos había decidido echar atrás su palabra de matrimonio. Es decir, se arrepintió y se escondió para no ir a la iglesia y evadir la boda ya programada", dijo el oficial.

El silencio invadió la comuna

Hasta el momento, se desconoce el paradero de este hombre, pero se cree que viajó hacia la ciudad de Florencia para huir a los comentarios del pueblo.

"Yo hablé vía celular con uno de sus familiares, quien me dijo que él está muy apenado, que estuvo encerrado en una pieza varios días para que nadie lo vea; pero, silenciosamente, salió hacia el Caquetá", aseguró un periodista de la localidad, Helmer Peña, al diario El Tiempo.

Esta no es la primera vez que sucede algo similar. Muchos aseguran que es la segunda vez que el mismo hombre "deja a una mujer con su vestido de matrimonio" plantada en el altar.

Con respecto a la novia, "tampoco se sabe nada ni cuál fue su reacción, pero ella ha permanecido callada y de incógnito para evitar burlas y escándalos" de los vecinos, agregó Peña.