El calvario de la atleta brasileña Ingrid Oliveira: "Fui acosada y recibí pornografía"

La destacada atleta brasileña, Ingrid Oliveira, rompió su silencio tras protagonizar una polémica y ser apuntada por un encuentro sexual en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.

La atleta junto a su compañera Giovanna Pedroso eran candidatas a medalla en la prueba sincronizada de salto con trampolín.

Sin embargo, la atracción hacia un compañero de la delegación nublaron su juicio y eso a lo que ahora recuerda como "un error" marcó su carrera.  

Todo ocurrió el 5 de agosto de 2016 cuando en la ceremonia de inauguración de los JJ.OO., Ingrid Oliveira arregló un encuentro con Pedro Gonçalves, un remero brasileño, en su habitación de la Villa Olímpica.

Se habían conocido en 2015, en los Juegos Panamericanos, y hasta ese momento su vínculo se restringía a las redes sociales.

"En los Juegos nos encontramos y empezamos a hablar y al final quisimos algo más. Antes de la ceremonia de apertura hablé con mi compañera de habitación para ver si podía llevarlo allí y me dejó”, comenzó declarando la clavadista.

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“No fui la única. Muchos también lo han hecho en otras competiciones. Tendrías que haber visto el número de preservativos que repartieron en la Villa. ¿Eran para hacer globos? Bolt se llevó a una chica sin acreditación a la habitación y hubo gente que hizo Tinder para ligar. Pero esos casos no se filtraron", declaró al sitio brasileño UOL.

El tema se agradando y tildaron a la nadadora de protagonizar un "maratón sexual" y la apuntaron de irresponsable por haber tenido sexo el día anterior a la competencia.

Sin embargo, la situación no fue así, ya que la clavista recién compitió el 9 de agosto y no fue expulsada de la delegación porque volvió a competir el 17 de agosto en las eliminatorias de 10 metros individuales, eso sí, con magros resultados.

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"Llevé a Pedro Gonçalves a mi habitación. Pero no fue en la víspera de la competición de ninguno de los dos. Y no pasó la noche conmigo. Lo que hice estuvo mal y soy consciente de ello. Me torturé mucho, pero me di cuenta de que el trato que recibía no era justo", cuenta la brasileña.

Tras la situación, Ingrid Oliveira relató que “fui acosada por el todo el mundo. Me han asediado. Recibí pornografía. Recibí propuestas para hacer programas sexuales, no de televisión. Y perdí trabajo. Fui atacada por medios del mundo entero. En Wikipedia me definieron como 'la niña que hizo pértiga'”.

Incluso, cuenta que “a veces las personas me paran y me preguntan '¿Sos Ingrid?' ¿de la olimpiada?' Y yo ya me imaginaba a aquella persona leyendo noticias hablando de mí: maratón de sexo salvaje, orgía, polémica.Pasé de 90.000 a 250.000 seguidores en Instagram", relató.

"Es todo tan loco que hicieron un relevamiento y quedé como uno de los cinco atletas más comentados de las Olimpiadas en todo el mundo. Yo, Simone Biles, Michael Phelps... Tengo más seguidores que Jack Laugher, que ganó el oro en los Juegos Olímpicos. ¿Sabes por qué? Porque yo simplemente tuve sexo. Ellos hicieron que mi culo valga más que una medalla olímpica", confiesa.

Al cierre, reveló que con su compañera de clavados no habló nunca más, pero aclara que ella no fue quien lo filtró a la prensa. Que sabe quién lo hizo pero que no lo dirá.

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Y que el remero Pedro Gonçalves no fue machista, que la contuvo en todo momento. Aclara que le costó volver a relacionarse, pero ahora está de novia con Gabriel, quien la "conocía de antes". Y, mientras rearma su vida y su carrera, busca dejar de ser "la chica linda de los saltos" para ser reconocida como "la atleta Ingrid Oliveira".