Conoce las sectas que han causado impacto en Chile
Túnicas, cantos, rezos, idiomas diferentes, vivir en comunidad y alimentarse de la tierra, entre otras, son algunas de las características que han presentado las sectas del país, que por una u otra razón han salido a la luz pública.
A continuación recordaremos los últimos casos que han conmovido, ya sea por la crudeza de sus actos o por lo impactante de sus relatos.
Secta de Colliguay
Es una de las que aún permanece en el inconsciente de la gente, pues el caso aún continúa en Tribunales. Aunque hace ya meses que fue descubierta, algunos de sus integrantes aún permanecen detenidos.
Uno de los hechos más espeluznantes realizados por los integrandes, fue el macabro sacrifico de un recién nacido, ocurrido el 21 de diciembre del 2012.
En el Fundo Los Culenes, donde Ramón Castillo o “Antares de la Luz” (guía o líder del grupo), junto a sus seguidores Davis Pastene, María del Pilar Alvarez, Carla Franchy y Natalia Guerra, quemaron un bebé recién nacido en una hoguera.
Según el desarrollo de la investigación, “Antares”, quien era -además- el padre del lactante junto con Guerra, indicó a sus seguidores que ese niño era el anticristo, puesto que su autodefinición de Dios le impedía tener descendencia, por lo que su propio hijo tenía que ser eliminado.
Tras los intensos preparativos del grupo, llegó el día del alumbramiento. Pero sin estar dentro de los planes, Natalia debió ser trasladada hasta la Clínica Reñaca, donde nació un varón por parto natural.
Al otro día, Castillo llegó hasta el centro asistencial y se llevó al menor sin autorización para trasladarlo hasta el Fundo donde lo esperaban sus seguidores y así comenzar con el rito que según ellos “salvaría al mundo”.
El hijo de “Antares” y Guerra fue situado en una tablón, desnudo y con una cinta en la boca sobre un fogón de dos metros de profundidad. Cuando la “ceremonia” llegó a su fin, los integrantes, que aparentemente eran 12, dieron vuelta la tabla y el menor cayó a las llamas.
La denuncia del caso fue realizada durante enero por la hermana de una de las integrantes de la secta. Fue en ese momento cuando la Policía de Investigaciones encontró el cuerpo del lactante completamente calcinado.
Destacar que luego de que el caso saliera a la luz, Ramón Castillo arranco del país y se refugió en el Cuzco, donde el 01 de mayo del 2013 decidió ahorcarse tras verse acorralado por la policía chilena, peruana y ecuatoriana.
Secta de Curacaví
En el tranquilo sector campestre de la Región Metropolitana otra secta estremecio al país cuando una menor de 14 años fue violada por un sujeto que aseguraba ser el hijo de Dios en la Tierra.
El hecho quedó al descubierto cuando los padres de la menor y ex integrantes del grupo religioso denunciaron al Ministerio Publico que el hombre de iniciales E.S.C.B. que lideraba un grupo de al menos 30 personas, todos con algún tipo de parentesco, habría abusado a la joven y que además sometía psicológicamente a los integrantes, que también debían mantener económicamente al supuesto hijo de Cristo, a su hermano e hijo.
Cabe destacar que el llamado “Mesías” realizó una violación anal contra la pequeña, puesto que uno de sus mayores mensajes eran que las mujeres solo debían tener relaciones sexuales de esa manera, porque sino perdería la virginidad y eso se convertiría inmediatamente en pecado.
Secta de Pirque
Aunque el transcurso de la investigación nunca arrojó si los integrantes de la secta sacrificaban animales, si fueron descubiertos por la inhumación ilegal de Jocelyn Rivas, quien falleció tras dar a luz a un bebé al interior de la comunidad.
En esta oportunidad, la ciudadana argentina Paola Olcese lideraba el grupo y era quien tomaba las decisiones de qué hacer al interior del recinto, sin embargo fue sobreseída de los cargos tras ser declarada inimputable por tener “delirios mesiánicos”.
Destacar que Rodrigo Meléndez, ex integrante de la secta que ahora se instaló en la Quinta Región, declaró que en el interior del grupo no se podía hacer nada sin el consentimiento de Olceses, porque ella era “Dios” o bien “El Señor” se manifestaba “a través de ella”.
Secta de Antofagasta
Uno de los últimos casos que alarmaron a las autoridades y a la opinión pública fue la secta que llevaba adelante un hombre conocido en Antofagasta como el “Ojo de Horus”.
Todo comenzó el 20 de agosto cuando un adolescente de 15 años se suicidó. Dos semanas más tarde repitió la acción un joven de 13, para luego continuar una de 15, quien era amiga de la primera víctima.
La policía logró relacionar las muertes porque todos tenían un dibujo de una pirámide con un ojo en su interior, alguno portaban la imagen al momento de la muerte, como otros la dejaron plasmada en sus habitaciones.
Tras un intento fallecido de atentar contra su vida, uno de los jóvenes que se colgó pero el cable se cortó declaró ante la policía que “Juan Limón”, como era conocido el líder del grupo, realizaba contantes rituales, donde se bebía sangre de animales y que eran presionados diariamente para que se suicidaran, incluso les decía que si no lo hacían ellos, lo haría él con sus propias manos.
