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El insólito lugar donde encontraron los restos del último tigre de Tasmania

En un insólito lugar de Australia fueron hallados los restos de un tigre de Tasmania, cuya especie fue oficialmente declarada extinta en 1980, pero su último ejemplar falleció en 1936, mientras estaba en un zoológico.

Conocido también como tilacino, este marsupial se caracterizaba por sus franjas parecidas a las de un tigre, que iban desde sus patas delanteras hasta el comienzo de su cola. Sus orígenes se remontan hace miles de años en territorio australiano y de Nueva Guinea, pero luego huyeron por razones del cambio climático.

En la Isla de Tasmania sobrevivió durante un largo tiempo, pero la llegada de los europeos durante el siglo XVIII aceleró su desaparición de la Tierra. Según se ha estudiado, esta especie era una feroz depredadora del ganado, así que las recompensas por su caza que se ofrecían hasta 1909 apuraron su extinción. 

¿Dónde fueron encontrados los restos del último tigre de Tasmania?

A más de 80 años después de su extinción, los restos del último tigre de Tasmania fueron encontrados al interior de un armario del Museo y Galería de Arte de Tasmania (TMAG, por sus siglas en inglés), ubicado en Australia.

 

Créditos: EFE.
Créditos: EFE.

 

Robert Paddle es uno de los académicos que publicará este hallazgo en la revista científica Australian Zoologist. Él señala que "durante años, muchos conservadores e investigadores de museos buscaron sus restos sin éxito, ya que no se había registrado ningún material de tilacinos que datara de 1936 en la colección zoológica, por lo que se asumió que su cuerpo había sido desechado".

Sin embargo, junto a su compañera Kathryn Medlock, concluyeron que los restos sí habían llegado al TMAG en 1936, solo que los taxidermistas no registraron correctamente su ingreso al recinto.

¿Por qué estaban guardados en el armario?

Los restos encontrados del animal extinto, específicamente la piel desollada y su esqueleto, su utilizaban en exhibiciones itinerantes, así que los encargados lo guardaban en un armario de la sección educativa del museo.

"La piel fue cuidadosamente curtida como una piel plana por el taxidermista del museo, William Cunningham, permitiendo así transportarla fácilmente y utilizarla como espécimen de demostración para las clases escolares sobre los marsupiales de Tasmania", aclaró Medlock.