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Engaño, traición y espionaje: la batalla judicial entre Google y Uber que tiene expectante a Silicon Valley

  • Por Meganoticias

Google y Uber han entrado en batalla y lo hacen en una corte federal de San Francisco (California).

Ha sido a través de Waymo, la firma de vehículos autónomos propiedad de la matriz de Google, la que ha acusado al servicio de taxis particulares de robar su tecnología.

Hace un año Waymo presentó una demanda contra Uber, por el robo de información. En la presentación se relató cómo la aplicación de transportes contrató los servicios de Anthony Levandowski, un ex ingeniero del proyecto de vehículos autónomos de Google que más tarde se transformó en Waymo, para llevarse archivos claves en la generación de la codiciada tecnología.

A Levandowski se le acusa de haber robado unos 14 mil documentos, que utilizó en una empresa que él fundó sobre la misma área y que  meses después Uber compró.

Durante el juicio, se expuso un mensaje entre el CEO de Uber, Travis Kalanick, y el cuestionado Levandowski donde le dice en breve: "Necesitamos ganar, el segundo lugar es para el primer perdedor".

El abogado de Waymo, citado por Business Insider, dijo en medio de los alegatos de apertura que tal conversación demuestra lo decidido que estaban en Uber de ganar a toda costa "sin importar si eso significaba hacer algo incorrecto".

"Uber está engañando, se llevaron nuestra tecnología en un esfuerzo por ganar esta carrera a toda costa", añadió.

Desde Uber, su abogado rechazó todo y comentó: "Lo diré desde un principio: no sucedió. No hay conspiración, no hay engaño, punto. Fin a la historia".

En los alegatos está llamado a declarar Levandowski, sin embargo ya se ha adelantado que hará su derecho de guardar silencio. Este ingeniero se negó a colaborar con la oficina legal de Uber, siendo en mayo pasado despedido de Uber a pesar de su cercanía con el CEO.

El enfrentamiento entre ambas compañías abre un nuevo flanco contra Uber, que ha sido acusada de espiar a la competencia, de tener malas prácticas laborales (incluido acoso) y engañar a las autoridades de todo el mundo.

Según Waymo, Kalanick conspiró con Levandowski para obtener y robar los miles de archivos sensibles. Es por ello que exigen una compensación de 2.000 millones de dólares, además de una prohibición expresa de no poder usar la tecnología en proyectos futuros. De ser así, Uber no podría hacerse con un servicio de vehículos autónomos.

El caso en todo caso se definirá entre lo que se establezca como "secreto comercial" y cómo se habría vulnerado propiedad intelectual de Waymo.