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"Mi marido era convincente, yo le creí": Esposa de hombre que se hizo pasar por PDI relata cómo iniciaron sus sospechas

Por casi 20 años, una mujer estuvo casada con un hombre que se hizo pasar por un comisario de la Policía de Investigaciones (PDI), cuando en verdad no tenía ningún vínculo con la institución.

La historia ocurrió en la comuna de Alto Hospicio, región de Tarapacá, en donde el sujeto tenía falsificaciones (de armas, placas, grilletes y hasta un casco táctico de la policía) para convencer a su esposa, la que empezó a dudar después de extraños sucesos en su casa.

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¿Cómo empezaron las sospechas de la mujer sobre el falso PDI?

Ambos conformaban un matrimonio que duró cerca de 18 años. Desde el primerísimo día en que se conocieron, el involucrado le afirmaba a su pareja que pertenecía a la PDI. "Incluso, me mostró un certificado donde decía que era policía desde 2001. Como mi marido era convincente, yo le creí", contó la afectada.

 

El hombre mantuvo su mentira durante los 18 años en que estuvo casado (imagen referencial de Aton)

 

A simple vista, no había tanta evidencia para dudar de él: siempre portaba un arma y una supuesta placa. En el segundo piso del hogar, además había una pieza que la utilizaba como oficina, en cuya puerta había un letrero con las siglas "PDI".

Sin embargo, había algo que no encajaba en la mujer: "Desde hace unos meses empecé a sospechar de él. Me llamaba la atención que pasaba todo el día en la casa y en la noche salía. Una vez lo encaré y se armó una discusión. Me dijo que, por naturaleza de su trabajo, no tenía horario", declaró, según consigna Las Últimas Noticias.

La gota que rebalsó el vaso

En diciembre de 2022, el falso comisario "apareció en la casa con una adolescente de 15 años y de nacionalidad venezolana. Dijo que le habían encargado su custodia, que debía cuidarla", comentó la cónyuge.

La joven se instaló en la pieza que el hombre usaba como oficina, espacio en la que regían estrictas condiciones: tenía una entrada independiente y, por orden expresa del impostor, a ella solo podían entrar él y la menor de edad.

 

Aseguró que debía cuidarla, pero el falso PDI abusaba de la joven venezolana (imagen referencial de Aton)

 

La situación se tornó insostenible para la esposa en septiembre pasado: "Una noche, mi marido llegó 'moreteado' por todos lados y con un diente menos. Le pregunté que qué le había pasado y me respondió que había tenido un procedimiento en las tomas. No me dijo más".

Invadida por la incertidumbre, la mujer entró a la "oficina prohibida" y fotografió todo lo que encontró: armas, escopetas, munición y copias de identificación de la policía, las que tenían los datos del sujeto y su falso cargo de comisario.

Exigió explicaciones y conoció la verdad

Con toda esa evidencia, el pasado viernes 13 de octubre, la engañada acudió a la Brigada de Investigación Criminal de la PDI en Alto Hospicio. Quería saber en qué estaba metido su marido, pero descubrió que era ella la que estaba inserta en una gran mentira: él realmente no era de la institución.

La misma noche del viernes, se armó un operativo policial en el hogar de la familia. Cuando los funcionarios entraron a la habitación que ocupaba la joven extranjera, la sorprendieron con el involucrado: desde hace tiempo que él abusaba sexualmente de ella.

 

El falso PDI poseía pistolas y municiones en su casa (imagen referencial de Aton)

 

Junto con tomarlo detenido y encontrar falsificaciones de la policía, los uniformados también hallaron 235 gramos de clorhidrato de cocaína y munición verdadera.

Actualmente, el protagonista de esta insólita mentira permanece en prisión preventiva, acusado de cuatro delitos: haber violado la ley orgánica de la PDI, tráfico de drogas, estupro (por mantener relaciones sexuales con la menor de edad) y tenencia ilegal de armas.

Si bien no mantenía antecedentes penales, el Tribunal de Garantía de Iquique lo consideró un peligro para la sociedad. 

Este artículo informa de un proceso judicial en curso, por lo que los involucrados no deben ser considerados culpables hasta que los organismos pertinentes lo determinen.