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Este aviso se cerrará en segundos

Desalojan "Toma VIP" de Arica en medio de protestas de familias residentes

¿Qué pasó?

Luego de casi tres años se concretó el desalojo de la denominada "Toma VIP" de Arica, ubicado en el humedal del Río Lluta, con presencia de Control de Orden Público (COP) de Carabineros.

El trabajo se da en medio de las protestas de las familias que llegaron hasta el predio para evitar la destrucción de estas viviendas emplazadas en un sector privilegiado de la ciudad. 

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Manifestaciones

A primera hora de este lunes, las familias residentes de la toma llegaron hasta el humedal con la intención de detener la demolición de las casas.

Sin embargo, las conversaciones y exigencias que no duraron mucho tiempo, ya que el equipo y la maquinaria ya estaban al interior de la toma, sacando portones y rejas de madera que habían instalado bajo el rótulo de comunidad ecológica.

"Ya se acercó la fiscal, ya nos dijo ya, o sea, una notificación. Yo no he firmado nada, ella se acercó a mí y ella nos dijo, te notifico que tienes que salir, no hay nada por escrito, ni mi nombre, ni RUT, yo no he firmado nada, no me han dado una solución y estoy quedando en la calle", afirmó un residente.

Trabajo de desalojo

Desde la empresa dueña del terreno apuntaron a las autoridades para que esta parte del humedal no sea tomada nuevamente por estas familias.

"Pero si hay que hacer cumplir y recuperar la autoridad en el país, no puede ser que personas que se arroguen y diciéndose medioambientalistas y se toman un terreno donde el problema es ese y donde no se pueden hacer grandes inversiones porque aún hay instancias por resolver", indicó Raúl Castro, Abogado de ADISA.

Las labores de desalojo se podrían extender hasta el día jueves, momento en que las autoridades y dueños del terreno esperan concretar el cierre de manera definitiva.

La toma

El terreno de 160 hectáreas, había sido tomado durante la pandemia, pero fue durante el último año que las casas de mayor valor se levantaron. En su mayoría, segundas viviendas con vista al mar en un terreno privilegiado a solo 10 minutos del centro de la ciudad.

En total, más de sesenta casas fueron contabilizadas en la toma. Algunas, de material ligero con un costo cercano al millón de pesos, mientras que otras fácilmente superaban los diez millones.

"Acá tenemos el delito de usurpación que dentro de sus distintas figuras existe la modalidad de la usurpación violenta que es aquella que nace cuando se impide que al propietario del lugar no ejercer sus actos de dominio respecto del mismo bien, que puede ser en la figura que nos encontramos acá", señaló el fiscal regional de Arica, Mario Carrera.