¿Bostezas muy seguido? Con estos alimentos puedes combatir el sueño
Si el sueño dificulta la realización de tus tareas en el hogar, el trabajo, la escuela o la universidad, seguramente no estás consumiendo alimentos que ayudan a combatirlo.
Desde líquidos a especias naturales, hay una variedad de productos que pueden reactivarte, dejando atrás la sensación de somnolencia que puedes tener durante el día.
La mayoría de estos alimentos son de fácil acceso —incluso, podrías ya tenerlos en tu despensa— y todos debieran consumirse en un momento en que se requiera concentración para efectuar tareas.
Vale decir, lo ideal es que sean degustados durante la mañana, cuando estás iniciando el día. Asimismo, deberías consumirlos, por última vez en el día, al menos, cuatro horas antes de ir a la cama por la noche, de modo que no alteren la calidad del sueño.
¿Cuáles son los alimentos para combatir el sueño?
Café
El producto insigne de los que combaten el sueño y uno de los más populares. El café es un sinónimo de la cafeína, sustancia que funciona como estimulante para nuestro sistema nervioso central, manteniéndonos generalmente en estado de alerta, activos, así que es ideal consumirlo antes de estudiar o trabajar.
En adultos se recomienda beber hasta cuatro veces al día, siempre que sea una medida de 150 ml de café colado. En el caso de embarazadas, debe haber un límite máximo dos tazas diarias. En los niños, siempre que sean mayores de 12 años, se sugiere dos tazas de hasta 130 ml.
Chocolate amargo
Otro clásico es el chocolate amargo, más cuando tiene una concentración de cacao superior al 70%. También es rico en cafeína, ideal para cuando requieras concentración; y contiene carbohidratos, lo que significa que aporta energía.
Un cuadrado de él, o 25 gramos al día, es una dosis recomendable, pero su consumo no es sugerido para personas con reflujo, úlceras gástricas, ansiedad, arritmias o insomnio.
Canela
Ya sea molida o entera, la canela no solo combate el sueño mediante la mejora en la concentración, también acelera el metabolismo gracias a la sustancia denominada cinamaldeído que posee.
Lo recomendable es consumir seis gramos de canela al día, agregándola en preparaciones como el té, jugos y dulces. Eso sí, está contraindicada en embarazadas o mujeres en periodo de lactancia, pacientes con úlceras gástricas o con enfermedades al hígado.
Jengibre
Según la entidad médica Rede D'Or, el jengibre es rico en gingerol, un compuesto que acelera el metabolismo, estimula la energía y quita el sueño.
Generalmente, se consume mediante infusiones (tres tasas máximas diarias) o se adiciona en sopas, ensaladas y jugos naturales.
No deberían consumirlo pacientes afectados con cálculos (piedras en la vesícula), quienes toman medicamentos coagulantes o padecen enfermedades hemorrágicas.
Yerba mate
Otro que goza de especial popularidad es la yerba mate: "Actúa en el cerebro bloqueando la adenosina, sustancia que provoca cansancio y sueño. Aumenta la producción de neurotransmisores con efectos estimulantes, como la adrenalina, noradrenalina y glutamato", consigna el organismo portugués.
Beber un litro y medio de yerba mate al día es suficiente, algo que debieran hacer los niños, las personas con insomnio, nerviosismo, ansiedad o presión alta. Para las embarazadas, su consumo tiene que ser moderado.
Té verde
Adicional a la cafeína, el té verde tiene catequinas, sustancias con propiedades termogénicas que quitan el sueño mediante el aumento de la temperatura corporal. Cuatro tazas de él al día es una dosis aceptable.
"No debe ser consumido por niños, y las mujeres embarazadas o que están en periodo de lactancia deben consultar al médico antes de beber este té", sugiere Rede D'Or.
Las personas que deben evitar su consumo son las que padecen problemas renales, en el hígado o en la tiroides; sufren de anemia, úlceras gástricas y gastritis; o tienen problemas para dormir.
Té matcha
Cuando las hojas del té verde aún no maduran, estas se utilizan para hacer té matcha. Como también posee cafeína, su consumo es óptimo para mejorar la concentración.
Al día puedes beber entre dos y tres tazas; o bien, añadirlo en preparaciones como tortas y jugos.
Las embarazadas o las mujeres que están en periodo de lactancia, además de los niños y los hipertensos, no deberían beberlo.
Ají
El ají destaca por la capsaicina que contiene, útil para acelerar el metabolismo y mantenernos alerta gracias a sus propiedades termogénicas.
La mayoría de las personas lo consumen añadiéndolo a otras preparaciones, como el pebre en el caso de chilenos. Otras lo utilizan para condimento en los asados, para las sopas, entre otros.
Una porción de hasta 16 gramos por día está bien, pero su consumo está contraindicado en pacientes con gastritis, reflujo, úlceras, presión alta o hemorroides.
Guaraná en polvo
"Por contener cafeína, teobromina y teofilina, sustancias que actúan en el sistema nervioso central estimulando la concentración y aumentando el estado de alerta, el guaraná en polvo es excelente para ayudar a quitar el sueño", señala el portal médico.
Se recomienda consumir cinco gramos de guaraná en polvo al día, añadiéndolo en jugos, infusiones o té. Por el contrario, las personas con ansiedad o pánico, los niños y las embarazadas o en periodo de lactancia no deberían tomarlo.
Bebidas energéticas
Disponibles en almacenes y supermercados, las bebidas energéticas son un clásico acompañante en los tiempos de estudio y trabajo. Están elaboradas con cafeína, azúcar y taurina, siendo este último un aminoácido que mejora el rendimiento mental.
Se puede beber cinco latas de 250 ml de bebidas energéticas al día, pero hay que prestar atención en cuántos milígramos (mg) de cafeína contiene una lata. Si supera los 80 ml, su consumo debe ser regulado.
Tal como los anteriores alimentos, posee contraindicaciones: no debiera ser consumida por personas con problemas cardiacos o presión alta, niños, embarazadas o en periodo de lactancia.
Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.
Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.
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