"Que no me meta la lengua": Revelan desagradable paso de Jean-Claude Van Damme por "Friends"
Diecisiete años han pasado desde que se emitió el último capítulo de una de las series norteamericanas más famosas de la historia. Se trata de “Friends”, una trama que sigue enamorando a miles de televidentes en todo el mundo, con sus 10 temporadas llenas de humor y diversión.
Aunque se conoce que los personajes protagonistas de la historia: Rachel Green (Jennifer Aniston), Mónica Geller (Courteney Cox), Phoebe Buffay (Lisa Kudrow), Joey Tribbiani (Matt LeBlanc), Chandler Bing (Matthew Perry) y Ross Geller (David Schwimmer), se convirtieron en grandes amigos durante el rodaje de la producción, recientemente salió un nuevo “secreto” que evidencia que no todo fue “color de rosa” y, al parecer, Jean-Claude Van Damme tiene mucho que ver.
Según confirman medios internacionales, el actor belga, invitado en uno de los capítulos, se “atrevió” a pasar por encima de los protocolos de actuación y, en la escena donde besa a Aniston y a Cox, les “metió” la lengua en la boca.
El día de la grabación
La grabación se realizó en 1996, cuando Van Damme intervino como estrella invitada en el episodio 'El de después del Super Bowl: Parte 2'. Según el productor Michael Lembeck, ambas protagonistas “sufrieron” al interactuar con el artista, ya que era "poco preparado y arrogante".
"Rodamos primero su escena con Jennifer -recuerda Lembeck-. Entonces ella se me acerca y me dice: 'Lem, Lem, ¿puedes hacerme un favor y decirle que no me meta la lengua cuando me besa?'".
Con el fin de “dar un respiro” a la situación, el productor le pide a Van Damme continuar con otra escena, esta vez con Cox. Sin embargo, se llevó la sorpresa de su vida: “Allá que viene Courteney a hablar conmigo y me dice: 'Lem, ¿puedes decirle que no me meta la lengua?'", confesó.
Aunque se trata de un tema bastante delicado, ninguno de los miembros de “Friends”, comentaron sobre el incidente que describe Lembeck. Sin embargo, tras 25 años de la grabación de ese episodio, lo más probable es que ya se haya “olvidado”.
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