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Meghan Markle posa oficialmente junto a Harry y todos se fijan en el reloj de Lady Di

  • Por Meganoticias

Un nuevo retrato oficial en blanco y negro de los duques de Sussex tiene un elemento especial: la duquesa Meghan Markle parece llevar el mismo reloj Cartier que la princesa Lady Di usó en muchos eventos.

La pareja posó felizmente para promocionar una conferencia sobre los peligros de las redes sociales en el evento Times100 Talks.

En la imagen, que fue capturada por el fotógrafo Matt Sayles, aparece Harry sonriente, mirando a la cámara, vestido de traje y camisa blanca. Al lado de él, sentada en una silla está Meghan Markle, también sonriente, pero desviando la mirada y con el cabello suelto. 

Ambos lucen relajados. Sin embargo, lo que ha llamado la atención de muchos es el atuendo y todos los accesorios con los que posó Meghan. Según el Daily Mirror, llevaba encima más 375 mil dólares, entre joyas y ropa.

Entre ellos, el reloj Cartier Tank Française de oro, valorado en 23 mil dólares y que era propiedad de su difunta suegra, Lady Di.

"Llevaba además su anillo de compromiso con un costo de 350 mil dólares, el traje de Alexander McQueen valorado en 2.800 dólares, y un brazalete también Cartier de un precio aproximado de 6.500 dólares", detalló el medio.

¿Realmente era el reloj de la princesa Diana?

Aunque los medios de comunicación, que siguen muy de cerca los pasos de los duques, afirman que el reloj que lució Meghan era propiedad de Lady Di; también puede tratarse de un ejemplar que la también actriz habría comprado en el año 2012, cuando aún ni siquiera conocía a Harry.

“Siempre he deseado el reloj Cartier Tank Française. Cuando descubrí que la serie Suits iba a tener una tercera temporada, que en ese momento me sentía como un hito, disfruté totalmente y compré la versión de dos tonos. Lo grabé en la parte de atrás con mis iniciales y planeo dárselo a mi hija”, dijo en una entrevista que concedió a la revista Hello!.

El famoso reloj fue diseñado por Louis Cartier en el año 1916, época en la que Estados Unidos había entrado en la Primera Guerra Mundial, pero no fue hasta finales de 1919 -cuando terminó la guerra- que el reloj salió a la venta. Se estima que en todo el mundo hay menos de seis mil ejemplares, reseñó el portal Magacín.