Hija planeó asesinato de su madre tras ser obligada a fingir que tenía cáncer y otras enfermedades por más de 20 años
Un dramático suceso tuvo como protagonista a una mujer llamada Gypsy Rose, quien desde pequeña sufrió con una obsesión de su madre, relacionada con la salud, lo que generó problemas que desencadenaron en un brutal asesinato en Estados Unidos hace algunos años.
Fue en 1991 cuando Clauddine "Dee Dee" Blanchard llevó por primera vez al médico a su hija, cuando solo tenía tres meses de haber nacido. Fue en ese instante cuando la mujer le comentó a los especialistas que la lactante dejaba de respirar cuando dormía.
Tras diversos exámenes, los doctores lograron determinar que Gypsy padecía apnea del sueño. Sin embargo, su madre no quedó conforme con el diagnóstico, por lo que siguió consultando por otros síntomas, lo que ya daba luces acerca de un extraño comportamiento.
Los diagnósticos de Gypsy
Este solo fue el inicio, puesto que a los siete años "Dee Dee" le dijo a su círculo cercano que su hija tenía unas alteraciones cromosómicas y distrofia muscular que le impediría caminar con normalidad. Es por esto que la mujer se consiguió una silla de ruedas y le exigió a Gypsy sentarse en ella, siendo que sí podía caminar.
Fue en 2001 cuando la pequeña fue tratada por su distrofia muscular, arrojando resultados alentadores. Pese al favorable diagnóstico, su progenitora siguió afirmando que tenía esa afección. Incluso, consiguió que otros médicos hicieran más estudios sobre los síntomas de la niña.
Ya con el paso del tiempo, Gypsy acumulaba una larga lista de enfermedades y trastornos, como por ejemplo, asma, epilepsia, problemas auditivos y musculares, discapacidad visual, parálisis del tronco inferior y daños en su sistema digestivo, entre otros, consigna Infobae.
Uso de medicamentos y efectos secundarios
Solo entre 2004 y 2014, ambas acudieron más de cien veces a distintos recintos médicos. Además, en esos años "Dee Dee" alimentaba a su hija a través de una sonda nasogástrica porque según ella había bajado mucho de peso.
Pero lo más sorprendente llegó después, ya que su propia madre reveló que a la pequeña le habían detectado una leucemia, además de una serie de otras afecciones por las que Gypsy tomaba medicamentos, los cuales hicieron que perdiera todos sus dientes.
Todo esto le trajo varios problemas a la niña, quien tampoco podía dirigirse a su colegio a estudiar, por lo que debió ser educada por "Dee Dee".
Pero eso no es todo, debido a que la pequeña no tenía amigos y en paralelo sufría de diversos efectos secundarios por la medicación que tomaba, al cumplir 19 años, comenzó a darse cuenta de los embustes. Esto sumado a que tampoco tenía una noción de cuál era su verdadera edad, ya que eran muchas las veces que su madre la había hecho mentir frente a otras personas. La situación desembocó en discusiones que después fueron subiendo de tono entre ambas.
En una oportunidad, la joven intentó escaparse de su casa, producto del cansancio y el estrés que sentía en ese momento. Pero su madre lo evitó y la encadenó a su cama durante dos semanas.
El crimen contra la madre
En 2013, Gypsy conoció a un joven llamado Nicholas "Nick" Godejohn en una página web de citas online. El sujeto padecía un desorden de identida disociativo (personalidad múltiple) y antes había sido detenido en un restaurante de comida rápida debido a una conducta obscena.
En este contexto, la mujer accedió a reunirse con él e incluso se lo presentó a "Dee Dee", quien de inmediato le prohibió que se siguieran viendo.
Así fue como ella y su pareja organizaron un "plan de liberación", afirmando al mismo tiempo que lo mejor era que la adulta muriera y que no había otra opción.
Durante la noche del 10 de julio del 2015, Gypsy dejó sin llave la casa en la que vivía con su madre en Springfield, Misuri, Estados Unidos. En ese momento, cuando la mujer dormía profundamente, recibió 17 puñaladas.
Al despertar por las agresiones, Nick le dijo a la mujer: "Soy tu maldita pesadilla".
Posterior al crimen, la joven y su pareja permanecieron un rato en el domicilio y luego escaparon con al menos 4 mil dólares que la fallecida tenía ahorrados. Días después, Gypsy señaló haberse sentido liberada con la "desaparición" de su madre y publicó en Facebook: "La p... está muerta".
El cuerpo de "Dee Dee" fue hallado por funcionarios policiales el 14 de junio del 2015. Respecto a Gypsy, fue ubicada en Wisconsin, en la vivienda de los padres de Nick, y posteriormente encarcelada, hasta el día de hoy.
Por otra parte, Nick confesó el crimen y en 2018 fue condenado a cadena perpetua por asesinato en primer grado: "Está bien, lo admito. Apuñalé a su madre", expresó.
En algunas fichas médicas, detectives a cargo del caso encontraron que doctores pensaron que la madre de la joven podía tener el síndrome de Munchhausen, que se presenta cuando una persona exagera y comienza a mentir para hacer creer que otra persona tiene una enfermedad con el objetivo de conseguir atención.
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