Las fotos virales de una adicta que dejó las drogas y se graduó con honores en la universidad
Parecen dos mujeres completamente diferentes, pero se trata de la misma Ginny Burton. La estadounidense sucumbió a lo más bajo de la adicción a las drogas y logró salir a flote gracias a su determinación y voluntad.
Las fotos del antes y el después de esta mujer, de 48 años, se han hecho virales. Burton llegó a pensar lo peor sobre su futuro. "Creí que moriría en el banco de un parque de un pinchazo en el brazo o de un disparo en la cabeza", escribió.
La mujer habló de un pasado difícil con una madre adicta y un padre en prisión, informó el portal 20 Minutos.
En las drogas a los 6 años
La madre de Burton sufría problemas mentales, era adicta y vendía drogas. Ella obligó a su hija de seis años a fumar marihuana, mientras que su padre pagaba condena por varios robos a mano armada.
Su historia de adicciones fue pasando a niveles más severos. A los 12 años consumió metanfetamina, mientras que a los 14 conoció el crack, cita una televisora afiliada a la ABC.
Según su testimonio, un cliente de su madre la violó cuando tenía 16 años y un año más tarde intentó quitarse la vida. Burton quedó embarazada siendo adolescente y el padre de su hijo fue asesinado.
Poco después, con dos hijos, se casó con un hombre que la maltrataba. A los 21 años se inyectaba heroína, robaba para conseguir dinero y estuvo presa en 3 ocasiones.
Así fue su cambio
En esas temporadas en prisión intentaba buscar la forma de salir de la adicción, pero no sabía cómo. En el 2012 fue detenida en un camión robado y recuerda que el episodio la llevó a decidir un cambio.
Con mucho esfuerzo por el nivel de intoxicación que tenía comenzó a trabajar como voluntaria en servicios sociales como parte de los programas de la prisión. Pasó siete años ayudando a otras personas adictas.
Burton adquirió la fuerza para comenzar a estudiar y después fue admitida en la Universidad de Washington y hasta fue acreedora de una beca de honor. Estudió Ciencias Políticas con tan buen desempeño que formó parte de un equipo académico en la institución.
Ahora su vocación está enfocada en ayudar a todas las personas dentro y fuera de las cárceles que viven la pesadilla de las adicciones.
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