La historia de un hotel con leyendas sobre fantasmas y suicidios que ahora es un museo
Su ubicación, en lo alto de una montaña, con un paisaje mágico y años de abandono, enmarcaron la leyenda de un edificio embrujado.
Se hablaba de la aparición de fantasmas producto de varios suicidios ocurridos en la zona, además de ofrecer una arquitectura antigua muy a gusto para los amantes de las películas de terror.
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Se trata de la casa museo Tequendama, ubicada en la ciudad de Bogotá, en Colombia, y según las autoridades, las leyendas urbanas sobre espantos son solo eso, leyendas.
Una historia de misterios
Resulta que esta casona fue el Hotel El Salto, ubicada muy cerca de la emblemática cascada Tequendama, aproximadamente a una hora de la capital colombiana.
A unos 180 metros de altura, se dice que durante el siglo XIX y comienzos del XX algunas personas subieron hasta estos precipicios solitarios para suicidarse, solo que no hay registro de que lo hayan hecho desde el hotel.
“Sobre lo que ven los turistas, pues cada quien inventa lo que quiera, pero en más de 20 años de estar allí nunca hemos visto nada", dijo al portal La Nación la directora de la fundación propietaria del edificio, María Blanco Castañeda.
Años de abandono
Blanco y su esposo, ambos veterinarios, desarrollan un proyecto ecológico en predios cercanos y quisieron involucrarse para preservar el inmueble que llevaba más de 30 años de abandono.
La casa fue construida entre los años 1923 y 1927. Contaba con salones de baile, bar, restaurante y una docena de habitaciones.
Lograron convertir el abandonado Hotel El Salto en la Casa Museo Tequendama - Biodiversidad y Cultura tras un acuerdo con los antiguos dueños.
De esta forma, la edificación con más de 90 años de antigüedad toma un nuevo aire para el disfrute de los turistas y por qué no, de los amantes del misterio.
En la actualidad, la casa-museo recibe visitas constantes y se ha hecho la cultura de las visitas guiadas para conocer más sobre este edificio enclavado en una zona llena de neblina, bosques y fauna silvestre.
Tras varios meses cerrado por la pandemia, la institución anunció la reanudación de sus actividades cumpliendo con todas las medidas de bioseguridad.
