Curioso: La razón del impulso de comprar mucho papel higiénico

No importa el país ni los aspectos culturales o religiosos. Desde que se desató el Covid-19 lo primero que desapareció de los estantes fue el papel higiénico, algo extraño si tomamos en cuenta que este artículo, en particular, en nada protege contra la pandemia.

Los psicólogos sociales de todo el mundo están analizando este comportamiento para tratar de entenderlo. Se han producido peleas y hasta llamadas a la policía por la escasez del producto, pues en muchos supermercados el producto de limpieza está agotado.

“Este es el momento de máxima pérdida de control, de máxima incertidumbre y de mayor cambio. La vida social se reduce de cien a cero. Nadie sabe lo que pasará", dice Britta Krahn, profesora de psicología empresarial en la Universidad de Ciencias Aplicadas de Bonn-Rhein-Sieg citada por la agencia de noticias alemana DW.

Para la académica se trata de un “comportamiento rebaño” esta acción de algún modo irracional que convierte al papel de baño en el rey de las compras de pánico.

"La gente siente la necesidad de hacer algo que los mantenga a ellos y a sus familias a salvo, porque ¿qué más pueden hacer aparte de lavarse las manos y aislarse?", precisa el profesor de psiquiatría de la Universidad de British Columbia Steven Taylor, citado por la AFP.

La policía de Oregon, en Estados Unidos, ha tenido que publicar un aviso para advertir a los ciudadanos que no deben llamar al 911 para reportar que se les terminó el papel higiénico.

Las autoridades tuvieron que ser muy crudas ante la avalancha de llamadas nerviosas por la escasez del producto que en nada tiene que ver con la protección contra el coronavirus.

“Por supuesto, siempre hay alternativas al papel higiénico: Recibos de comestibles, periódico, trapos de tela, encaje, bolas de algodón (…) Sé ingenioso. Ten paciencia. Hay una escasez de papel toilette. Esto también pasará. Simplemente no llames al 911. No podemos traerte papel higiénico”, sostiene el post en Facebook de la policía, hablando un poco en serio, y otro tanto en broma.

Pero la realidad es que este comportamiento general es digno de estudio, pues en términos más racionales, los alimentos son más prioritarios para mantenerse en cuarentena y se compra más papel higiénico que enlatados.

El sociólogo e investigador de riesgos Ortwin Renn, en Potsdam, Alemania, diferencia entre tres tipos de compradores de papel higiénico: “En la investigación de riesgos, sabemos que existe la persona que ignora el peligro, el que escapa atrincherándose y el luchador". 

“Estos últimos se vuelven activos contra la amenaza y hacen compras exageradas como especie de ‘acto sustitutivo’".

La sicóloga empresarial Anja Achtzinger, de la Universidad Zeppelin, en Friedrichshafen, precisa que en la cuarentena “se habla permanentemente si se ha comprado y almacenado es muchas cosas. Quien no haya amontonado nada, se pondrá nervioso y entonces también comprará en exceso”.

Estos días difíciles exigen mucha racionalidad, planificación de los recursos de la casa y una buena administración de la despensa. Sin embargo, el papel higiénico se ha convertido en una metáfora de la seguridad, incluso en un símbolo de la crisis.